El voto de la frontera se mueve hacia la izquierda
En Baja California, Morena tiene en las encuestas hasta ocho puntos porcentuales arriba de los otros partidos
MEXICO.- Desde que se mudó a Tijuana, procedente de Sonora, Alejandro Rivera, un trabajador de la empresa maquiladora Avery, observa el recurrente triunfo del Partido Acción Nacional (PAN) que lleva en el poder casi 30 años tras la victoria de Ernesto Ruffo, quien arrebató al Revolucionario Institucional (PRI) el poder en Baja California.
Sin embargo en los últimos meses, una ligera inclinación del voto fronterizo el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) apunta a posibles sorpresas en la frontera.
“Yo siempre había sido el único de izquierda entre mis amigos y mi familia: en 1994 voté por Cárdenas, en 2006, 2012 por Andrés Manuel López Obrador y ahora voy a hacerlo también’’, cuenta en entrevista telefónica con este diario.
“Yo era el prietito en el arroz, de los pocos votos que sacaba la izquierda en la frontera pero ahora veo que mis amigos están cambiando y lo están diciendo en las reuniones y también por Facebook: estoy muy sorprendido’’.
Los estados norteños de Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo León, Sinaloa, Sonora y Tamaulipas han sido políticamente más conservadores y reticentes a apoyar a partidos de izquierda cuyos discursos de división de clases no han hecho más que levantar miedos; sin embargo, la rabia por falta de políticas públicas federales eficientes contra la corrupción y la impunidad, comienza a pasar la factura.
Principalmente en Baja California, Morena tiene en las encuestas hasta ocho puntos porcentuales arriba de los otros partidos y, en el resto de las entidades, ha crecido hasta cinco puntos aunque conserva algunas antipatías fuertes como en Sonora, uno de los bastiones del PRI, y algunos votos duros con el PAN en algunas ciudades de Chihuahua y Tamaulipas, estados recientemente arrebatados a los priistas
Alejandro Rivera, de 40 años, argumenta que su simpatía por Morena se debe a que las políticas económicas del PRI y del PAN locales no han arropado a un sector de la población que está muy desprotegido. “Afortunadamente a mi me ha ido muy bien: tengo un trabajo, me doy mis gustos y hago algunos viajecitos pero soy alguien de la minoría’’.
Para el politólogo Víctor Alejandro Espinoza, director del Departamento de Estudios y Administración Pública del Colegio de la Frontera Norte, otra de las razones por las cuales la frontera norte podría estar reconsiderando su voto es por “el descontento de los ciudadanos que no han visto mejorada su situación en temas seguridad (con los índices más altos de presencia de crimen organizado); aumento del impuesto del IVA (de 15 a 18% en el último sexenio) debido a la Reforma Fiscal; y el gasolinazo con la reforma energética’’.
El sufragio de los estados de la frontera norte representa el 37% del voto total del país y, camino a las presidenciales, el candidato de izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, calcula que de ahí puede sacar los votos que necesita para consolidarse sin problemas más allá del sur, donde concentra a la mayoría de sus simpatizantes tradicionalmente en el sur.
Por ello arrancó su campaña como candidato de la coalición Juntos Podemos en Ciudad el pasado 1 de abril en Ciudad Juárez, Chihuahua, donde nunca ha podido ganar: en 2006 se quedó sólo con 18.31% de la votación emitida, y seis años más tarde, con 23% por ciento.
Ahí prometió bajar el IVA y poco después nombró a sus dos de sus principales alfiles políticos — Marcelo Ebrard, ex jefe de gobierno, y Ricardo Monreal, ex gobernador de Zacatecas— como coordinadores regionales así como a Tatiana Cloutier, la hija del ex líder del PAN Manuel Cloutier como su vocera nacional y estratega en Nuevo León, otro estado reticente.
“La ventaja de Morena es que no ha gobernado y que la sociedad está harta de que, a pesar de la alternancia sigue habiendo eventos escandalosos de corrupción e impunidad y que los mismos políticos salten de puesto en puesto’’, observó Isaí Lara, editor de política del semanario bajacaliforniano Zeta.
Ahora mismo, Jorge Hank Ron, un siniestro personaje relacionado al homicidio del periodista Héctor Felix Miranda, que ha cogobernado con el PAN quiere ser gobernador por el PRI — señala Lara— mientras Morena, por otro lado, hace alianza entre priistas marginados. “Al final de cuentas son los mismos personajes con otras siglas, el mismo sistema’’.