Encuentran a 11 niños secuestrados por extremistas islámicos en Nuevo México
Los pequeños fueron hallados en condiciones infrahumanas, sin agua potable ni comida
Once niños de entre 1 y 15 años fueron rescatados en Nuevo México luego de que agentes asaltaran un complejo improvisado ocupado por “extremistas” armados, afirmó la policía.
Según informa ABC el hallazgo se produjo después de que las autoridades recibieran una llamada alertando sobre una persona al borde de la inanición, que se creía podía ser un niño secuestrado tres años atrás, según informa la oficina del alguacil del condado de Taos, Nuevo México.
La investigación comenzó el año pasado en el lado opuesto del país, en Jonesboro, Georgia, donde Siraj Wahhaj, de 39 años, nativo del condado de Clayton en ese estado del sureste, fue acusado de secuestrar a su hijo, que finalmente no fue encontrado en el campamento de Nuevo México.
El 2 de agosto, el sheriff del condado de Taos, Jerry Hogrefe, emitió una orden de búsqueda que describía “un campamento improvisado de neumáticos y tierra” en una subdivisión donde se creía que estaban Wahhaj y Lucas Morten.
El FBI tenía información y estaba vigilando el lugar, pero “no creía que hubiera motivos suficientes para ingresar en la propiedad”, contó Hogrefe.
Sin embargo, cuando recibieron la llamada avisando de que había una urgente necesidad de comida y agua todo cambió y decidieron actuar, declaró el sheriff en un comunicado.
Según fuentes internas, tenían datos suficientes que apuntaban a que “los ocupantes probablemente estaban fuertemente armados y eran considerados extremistas de la creencia musulmana”, informa abc.com
Una docena de oficiales ingresaron al lugar, donde descubrieron a los dos hombres con un rifle AR-15, cinco cargadores de 30 cartuchos y cuatro pistolas cargadas, incluida una en el bolsillo de Wahhaj.
La policía también encontró muchas más municiones en sucio y antihigiénico campamento, que no contaba con agua ni electricidad.
En esas condiciones encontraron las autoridades a los niños, sin comida ni agua. Tampoco zapatos ni ropa, iban vestidos con trapos sucios y bolas de basura.
La redada se realizó sin que se produjeran mayores incidentes ni heridos, indicó la policía.