Senado programa audiencias de confirmación del juez conservador Brett Kavanaugh para el mes próximo
Grupos cívicos temen que, de ser confirmado, Kavanaugh inclinará el Tribunal Supremo hacia los conservadores
WASHINGTON— El Comité Judicial del Senado ha programado para el mes próximo las audiencias de confirmación para el juez conservador, Brett Kavanaugh, para un puesto vitalicio en el Tribunal Supremo, mientras líderes demócratas y grupos cívicos denunciaron que el proceso acelerado no permitirá tiempo para una revisión exhaustiva de su expediente jurídico.
Kavanaugh fue nombrado al puesto en el Tribunal Supremo por el presidente Donald Trump, en reemplazo del juez Anthony Kennedy, quien anunció su jubilación a finales de junio pasado.
El juez conservador afronta una férrea oposición de la mayoría de los líderes demócratas, y grupos defensores de las mujeres y las minorías, entre estos el grupo “Hispanos por un Sistema Judicial Justo” (“Hispanics for a Fair Judiciary”, HFJ).
El presidente del Comité Judicial del Senado, el republicano Chuck Grassley, informó hoy a su bancada de que las audiencias se llevarán a cabo entre el 4 y 7 de septiembre próximos, aunque podrían prolongarse.
Según el horario de audiencias, el primer día está apartado solo para las declaraciones de los senadores, Kavanaugh comparecerá el 5 de septiembre, seguido por otro día de testimonios de expertos legales.
Se prevé que Kavanaugh responda a preguntas sobre su independencia jurídica y sus posturas en temas como el derecho al aborto, la libertad religiosa, la supresión del voto de las minorías, e inmigración, entre otros asuntos de la vida nacional.
La meta es que el Senado someta a votación su nombramiento y, de ser confirmado, Kavanaugh tome juramento a tiempo del comienzo de la próxima sesión del Tribunal Supremo en octubre.
El liderazgo republicano y grupos conservadores afines han elogiado la obra y figura de Kavanaugh y anticipan su rápida confirmación, pero los demócratas y grupos progresistas dudan de su imparcialidad y cuestionan la transparencia del proceso.
Los demócratas, entre estos el líder de la minoría en el Senado, Chuck Schumer, acusan a los republicanos de organizar deprisa las audiencias porque quieren ocultar información, quizá porque “le temen al historial” del juez.
El senador demócrata de Vermont, el de mayor rango en el Comité, Patrick Leahy, condenó el escaso tiempo programado para revisar todos los archivos de la extensa carrera de Kavanaugh, incluyendo su paso por la Casa Blanca durante la presidencia de George W. Bush.
Según Leahy, la revisión del historial de Kavanaugh pasó de ser un proceso “vergonzoso” a convertirse en una “verdadera farsa”.
“Es el proceso de revisión más partidista y menos transparente de un nombramiento al Tribunal Supremo en la historia moderna”, se quejó Leahy.
Por su parte, el senador demócrata por Illinois, Dick Durbin, destacó la importancia de revisar todos los documentos de Kavanaugh para evaluar su credibilidad e independencia jurídica, así como sus posturas legales y temperamento.
“El pueblo estadounidense merece saber la verdadera historia del hombre que busca un nombramiento vitalicio en la máxima corte del país. Pero está claro que hay cosas de su historial en la Casa Blanca que los republicanos del Senado no quieren que el pueblo vea; ¿qué esconden?”, observó Durbin.
La senadora demócrata por California, Dianne Feinstein, envió hoy una carta a Grassley exigiendo que su bancada y el público tengan acceso a todo el historial de Kavanugh, y no solo a los documentos que el liderazgo republicano ha soltado a cuentagotas.
Según Feinstein, el comité ya recibió 175,000 páginas de la Biblioteca Presidencial de George W. Bush relacionados con el juez, pero de estas solo ha divulgado 5,700.
Scheduling a hearing in early September, while more than 99 percent of Kavanaugh’s White House records are still unavailable, is not only unprecedented but a new low in Republican efforts to stack the courts. #WhatAreTheyHiding
— Senator Dianne Feinstein (@SenFeinstein) August 10, 2018
Pero tanto Grassley como la Casa Blanca han intentado minimizar las quejas de los demócratas al indicar que ya se han revisado miles de páginas relacionadas con la trayectoria jurídica de Kavanaugh.
Mientras, el HFJ, una red de activistas y expertos legales, académicos y cívicos latinos en todo EEUU, destacó que los jueces son “la última línea de defensa” de los derechos y protecciones de los votantes, trabajadores y minorías y, a su juicio, Kavanaugh no es la persona idónea para el cargo y su confirmación perjudicaría a la comunidad inmigrante.
El grupo envió hoy una carta a Grassley y a Feinstein para que las audiencias de confirmación recojan testimonios para asegurar que “las voces y perspectivas de los latinos en EEUU tengan representación en la mesa”.
“Si el Juez Kavanaugh es confirmado, el resultado será la erosión de muchas de las victorias que los derechos humanos han logrado en la última mitad de este siglo”, advirtió José Pérez, del grupo “LatinoJustice PRLDEF”.
El presidente y abogado general de MALDEF, Thomas Saenz, señaló que, en lo que se refiere a los derechos de los inmigrantes, los documentos publicados por Kavanaugh dejan entrever posturas dañinas para la comunidad.
Bren Driscoll, director de programa jurídico del grupo ecologista “Liga de Votantes por la Conservación”, dijo que los republicanos quieren poner un “sello de aprobación” a Kavanaugh sin permitir el debido proceso de revisión exhaustiva que los votantes merecen.