Serie Mundial: Dodgers viven pesadilla con dos outs y Boston está arriba 2-0
El cambio de pitcher le falla otra vez a Los Ángeles y sus últimos 16 bateadores son retirados
Mookie Betts y Rafael Devers celebran la victoria en el juego 2 de la Serie Mundial ante los Dodgers de Los Angeles. (Foto: EFE/JOHN G. MABANGLO) Crédito: JOHN G. MABANGLO | EFE
Los Medias Rojas de Boston anotaron todas sus carreras cuando ya tenían dos outs en la pizarra, incluyendo un sencillo de dos anotaciones de J.D. Martínez que rompió un empate en la quinta entrada, y vencieron a los Dodgers de Los Ángeles 4-2 el miércoles en Fenway Park para tomar una ventaja de 2-0 en la Serie Mundial.
El juego 3 de la serie al mejor de siete será el viernes en Los Ángeles, donde los Dodgers intentarán volver a la vida, sobre todo en la caja de bateo, porque sus últimos 16 bateadores del juego 2 fueron retirados sin mucha resistencia.
Mientras el bateo se ausentó por completo, los campeones de la Liga Nacional y especialmente su manager Dave Roberts volvieron a irse abajo en la quinta entrada cuando el pitcheo de relevo falló, casi en una copia del juego 1.
El rally de la victoria para los Medias Rojas vino cuando más asentado y dominante se veía el abridor Hyun-jin Ryu, que había retirado a los primeros dos bateadores del quinto inning. Christian Vázquez pegó sencillo al jardín derecho, Mookie Betts dio hit al central y Andrew Benintendi recibió base por bolas.
En un abrir y cerrar de ojos las bases se habían llenado y el manager Roberts llamó al bullpen tras 69 lanzamientos del zurdo coreano. Pero Ryan Madson, que en el juego 1 no hizo un buen trabajo cuando relevó a Clayton Kershaw también en la quinta entrada, entró a tirar “pedradas” y caminó en cinco lanzamientos a Steve Pearce –Madson lo caminó en cuatro una noche antes– para forzar la carrera del empate “de caballito”.
Con el juego 2-2, vino a batear J.D. Martínez y sacó una línea que cayó por delante de Yasiel Puig en el derecho para adelantar a su equipo 4-2. En apariciones de relevo en los primeros dos juegos de la Serie Mundial, Madson permitió que los cinco corredores dejados en base por los abridores de los Dodgers pisaran el home. La definición de una tarea fracasada.
Los Medias Rojas abrieron la pizarra en el segundo inning contra Ryu (4.2 innings, 6 hits, 4 carreras limpias, 5 ponches, 1 base) con el sencillo de Ian Kinsler para remolcar ya con dos outs a Xander Bogaerts, quien se embasó con doblete.
El mejor momento de los Dodgers fue en la cuarta entrada, cuando anotaron dos veces. David Freese, el mejor del equipo en la caja de bateo en la serie, dio hit, Manny Machado hizo lo mismo y Chris Taylor trabajó una base por bolas del abridor David Price para que se llenaran las bases sin out.
Matt Kemp, tratando de ser agresivo, le tiró a la primera pitcheada y sacó elevado al central que impulsó una carrera. Enrique Hernández, atravesando un horrible slump, se ponchó y aunque Puig dio sencillo al central para impulsar el 2-1 en los zapatos de Machado, el inning se apagó con el ponche de Austin Barnes.
Los Dodgers convirtieron una casa llena sin out en dos anotaciones; no está mal, pero a la sombra de la derrota se siente como que ese botín fue modesto. Y es que tras ese solitario ataque, el pitcheo de Boston retiró a los siguientes 16 bateadores visitantes.
Price fue el vencedor por segundo inicio seguido de postemporada tras fallar en sus anteriores 11, con juego de 3 hits y 2 carreras en 6 innings. Los relevistas Joe Kelly, Nathan Eovaldi y Craig Kimbrel no permitieron hit en 3 innings de labor.
