¿Cómo bajar la fiebre rápido en niños naturalmente?
Se pueden aplicar diversas técnicas para disminuir la fiebre poco a poco
Para evitar medicamentos para reducir la fiebre, como el paracetamol o el ibuprofeno, o cuando simplemente no tienes nada a mano, puede probar un método no médico para bajar la fiebre de tu hijo/a.
Reducir la fiebre de su hijo no ayuda a curar la enfermedad o el problema subyacente. La fiebre, en realidad, puede ayudar al cuerpo de tu hijo a combatir una infección. Pero si la temperatura sube lo suficiente como para que tu hijo se sienta realmente incómodo o deshidratado, reducir la fiebre puede ayudar.
Aquí hay algunos métodos que hemos recopilado:
- Coloca un paño frío y húmedo en la frente de tu hijo mientras descansa.
- Dale un baño de tina tibia o un baño de esponja. A medida que el agua se evapora de su piel, la enfriará y bajará su temperatura. No uses agua fría. Puede hacer que se estremezca y aumente la temperatura de su cuerpo.
- Del mismo modo, no uses alcohol (un remedio para la fiebre a la antigua). Puede causar un pico de temperatura y posiblemente incluso intoxicación por alcohol.
- Ofrécele a tu hijo muchos líquidos y alimentos fríos, como paletas heladas y yogur, para ayudar a enfriar el cuerpo desde adentro hacia afuera y mantenerlo hidratado.
Otras recomendaciones
- Manten el ventilador en una posición baja y haz que circule el aire a su alrededor en lugar de soplar directamente sobre el o ella.
- Quítale las capas de ropa necesarias para que tu hijo pueda perder calor más fácilmente a través de su piel.
- Llama al médico de inmediato si tu hijo tiene menos de 3 meses y tiene fiebre. Para un bebé de 3 a 5 meses de edad, llama al médico si su temperatura alcanza los 101 °F grados o más. Una vez que tenga 6 meses de edad, llama si su fiebre alcanza los 102 grados o más.
No importa la edad de tu hijo, aunque estos métodos naturales sirven para disminuir la fiebre, llama al médico si tiene fiebre junto con otros síntomas graves, como dificultad para respirar o manchas púrpuras en la piel. Estos pueden ser un signo de una infección bacteriana o una enfermedad grave.