“Ya nos salimos del negocio de migración”, dice el Sheriff de Los Ángeles
En su “estado del Sheriff,” Alex Villanueva culpa a su predecesor por aumento de ataques en las cárceles y problemas presupuestales
En su primer reporte del “estado del Sheriff,” el titular de esta agencia señaló que desde que asumió el cargo en diciembre pasado, sus agentes ya no colaboran con autoridades migratorias dentro o fuera de las cárceles, a menos que los reos caigan en categorías donde la ley de estado santuario lo permita.
“Estamos totalmente fuera del negocio migratorio”, dijo Alex Villanueva en una conferencia de prensa donde habló de los retos presupuestales del Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles y un aumento en los ataques entre reclusos y de presos contra los guardias – cosas que el culpó en la administración de su predecesor.
Villanueva dijo que emitió una directiva a sus agentes indicando que dejarían de permitir la presencia y entrada de agentes migratorios a las cárceles, cortes y estaciones del Sheriff para “acciones migratorias civiles”.
Dijo que cuando agencias locales del orden colaboran con migración, “pones en peligro la seguridad del público”.
“Por eso es que las dos no se mezclan”, recalcó.
Como prueba, dio el ejemplo de un análisis de violaciones reportadas en las estaciones del Sheriff del Este, Century y Pico Rivera – con enorme población latina.
Mientras que los reportes de violaciones casi se duplicaron de 489 en 2011 a 860 en 2018, hubo un aumento de 91 a 134 reportes durante ese mismo tiempo en las tres estaciones. Pero de hecho, hubo un descenso del 13% entre 2016-2018, lo que Villanueva calificó como “el efecto Trump”.
“Tenemos que dejarle saber a las comunidades indocumentadas que es seguro acercarse con las agencias del orden cuando son víctimas de crímenes”, dijo Villanueva.
Agregó bajo su liderazgo, “no tenemos espacios en las cárceles reservados para agentes de ICE” y que “el personal del Sheriff tiene prohibido ejecutar las leyes de migración”.
Añadió que sólo responderán a los pedidos de retención migratoria de reclusos cuando lo permita la ley de estado santuario; numerosos delitos violentos sí califican para estas retenciones.
Déficit y cárceles
Durante su intervención ante los medios de comunicación, el Sheriff también pintó una nada positiva imagen de las finanzas y el aumento de la violencia en las cárceles, algo por lo que culpó a su predecesor, Jim McDonnell, a quien derrotó sorpresivamente en noviembre pasado.
“Estamos peor ahora de lo que estábamos en 2013”, dijo Villanueva.
Actualmente, el Departamento del Sheriff enfrenta un déficit de 141 millones de dólares, a consecuencia, según él, un aumento en los reclamos de compensación al trabajador y menos agentes, lo que genera más trabajo para los que quedan y una “baja de moral” en toda la agencia.
Dijo que su trabajo ahora es llevar estas cifras en la dirección opuesta.
También culpó a la administración pasada por permitir que se incrementen los ataques entre reos y contra los guardias en las cárceles del condado al emitir reglas que limitaban a los agentes que resguardan los penales de actuar cuando son atacados.
Aunque la población carcelaria se redujo a más de 16,000 presos en la actualidad, lo que sí subió fue el número de los reclusos con problemas mentales. Actualmente son 5,110, lo que significa que “1 de cada 3 reclusos ha sido diagnosticado con enfermedades mentales”, dijo Villanueva.
Asimismo, los ataques entre reos (2,073 a 3,632) y contra guardias (de 190 a 577) aumentaron entre 2013 y 2018 y hubo un descenso en los incidentes de uso de fuerza por esos casos.
Esto hace pensar a Villanueva que se emitieron órdenes a los guardias que “evitaban que controlaran a los reos”.
“Eso te lleva a lesiones, pérdida de vidas, disturbios y eventos a gran escala…eso no es aceptable bajo mi cargo”, dijo.
Agregó que revisarán las políticas, direcciones y órdenes que llevaron a “que nuestros empleados crean que no se pueden defender a sí mismos”.