¿Cómo evitar fraude por teléfono bajo la promesa de parar su deportación?
Tenga cuidado cuando le llamen a su celular y se hagan pasar por agentes de migración
Como a la una de la tarde del jueves 31 de enero, Gualterio Santos, propietario de florerías de la ciudad de Santa Ana, recibió una llamada a su teléfono celular, de parte de un sujeto que se hizo pasar como agente de migración y le prometía removerle su orden de deportación.
Gualterio dice que se alegró porque el hombre dijo llamar de parte del congresista Lou Correa para ayudarle a arreglar su estatus migratorio en unos tres meses.
Justamente en octubre pasado, el Servicio de Migración y Aduanas (ICE) le dio tres meses a Gualterio Santos para que vendiera sus negocios y regresara a México debido a que tenía una orden de deportación previa.
La historia de Gualterio acaparó titulares de prensa y televisión por todo el país.
“Necesito verificar si estoy hablando con Gualterio Santos”, le dijo el hombre por teléfono.
“Usted se acuerda en qué estado sacó su seguro social? ¿Cuantos hijos tiene usted? En qué año ingresó a los Estados Unidos. Estas son preguntas de seguridad”, le aclaró.
A Gualterio, la conversación le empezó a parecer sospechosa. Así que le puso el altavoz a su teléfono y le hizo señas a su esposa para que la grabara.
“No recuerdo ahorita, la verdad”, respondió Gualterio a las preguntas.
“Vamos a remover su paro de deportación. Eso es algo entre el señor Lou Correa y yo, que me pidió que lo ayudara porque si usted se va por la vía legal, toma más tiempo”, le dijo el supuesto agente de migración.
“Lou Correa me prometió que me va a ayudar, y tengo mucha confianza en él”, completó Gualterio.
“Como yo voy a saber que usted es Gualterio Santos”, insistió el sujeto. “Puede verificar su número de seguro social”, le urgió.
“No lo tengo al momento”, respondió el inmigrante.
“Si usted quiere hacerlo por la vía legal, no hay problema yo le digo a Lou Correa que no lo pude ayudar. Necesito que verifique su seguro social”, le volvió a repetir el dichoso oficial.
“Cómo se llama usted”, preguntó Gualterio. “Solo Ida. Nosotros no revelamos el primer nombre. No hay problema, vaya por la vía legal. Como le digo, yo estoy haciendo esto como un favor. Él (Lou Correa) me llamó hoy y me pidió que lo ayudara”.
“Déjeme llamar a mi amigo. Por qué vía le mandamos los papeles:, le dijo Gualterio al hombre. “Su abogada va a saber”, terminó diciendo el supuesto agente en la conversación telefónica.
El hombre hablaba español, pero claramente se notaba que no era su primera lengua.
Le preguntó al hombre porque la llamada aparecía con un número telefónico de Las Vegas. “Me respondió que porque en Las Vegas están las oficinas centrales de migración”.
Cuando colgó el teléfono, a Gualterio le entraron los nervios y la desconfianza. Pensó de inmediato que tal vez era un estafador. Le llamó al congresista Correa, pero no pudo hablar con él hasta el siguiente día.
“Cuando al fin pudimos hablar, pero dijo que él no había hablado con ningún agente de migración, y no le había pedido a nadie que lo ayudaran. Eso es una estafa, me dijo Lou”.
Gualterio está preocupado porque le dio su fecha de nacimiento al supuesto agente de migración.
“Yo le recomiendo a mi comunidad, que cuando les hable alguien que se hace pasar como agente de migración, tengan cuidado y no les den ninguna información personal, pueden ser estafadores”, advirtió temeroso.
Estafas de impostores
Rigo Reyes, director de la Oficina de Asuntos para los Inmigrantes del condado de Los Ángeles, dijo que lo sucedido a Gualterio fue un intento de estafa de impostores.
“Se hacen pasar por alguien que no son. Lo primero que deben saber, es que las agencias de gobierno nunca nos van a pedir por teléfono, información confidencial, dinero o a amenazar. Ellos tienen que documentar todo y por eso mandan cartas como lo hace el IRS (Servicio de Recaudación de Rentas)”, precisó.
“Las alertas rojas que la comunidad debe considerar para descubrir que están tratando de estafarlo son: cuando les piden dinero, información o los amenazan”, puntualizó.
Pidió a quien haya sido víctima de la estafa de un impostor en el tema de migración o cualquier otro, que lo reporten al 1-800-593-8222 del Departamento de Asuntos del Consumidor del condado de Los Ángeles. “Si no tienen estatus migratorio, no se preocupen, toda la información que proporcionada es confidencial. Aquí estamos para protegerlos”, enfatizó.