Los secretos del mítico tema ‘Genie In A Bottle’ de Christina Aguilera
La cantante ha celebrado el veinte aniversario de su primer gran éxito musical revelando algunos de los detalles menos conocidos
Este fin de semana se ha cumplido el veinte aniversario del lanzamiento de ‘Genie in a Bottle’, el sencillo que colocó a Christina Aguilera en la escena musical de finales de los 90 y la convirtió en una seria competidora en la contienda por hacerse con el título de princesa del pop que acabaría recayendo en Britney Spears cuando ella dio un giro a su estilo para explorar otros sonidos.
La artista ha querido conmemorar una fecha tan especial echando la vista atrás en las redes sociales para reconocer que se siente algo abrumada ante lo rápido que ha pasado el tiempo y recordar algunos de los detalles tras el rodaje del icónico vídeo musical que acompañó al tema, del que también realizó una versión en español titulada ‘Genio atrapado’.
“Recuerdo que con tan solo 18 años y a la vuelta de un viaje a Japón me enteré de que la canción había llegado al número uno de la lista Billboard y estaba tan agradecida… Me sentía muy afortunada de que les hubiera gustado tanto como a mí. Gracias, gracias, por acompañarme en este viaje todos estos años. Mis guerreros, los quiero“, explicó en su cuenta de Instagram, donde también compartió un antiguo vídeo suyo en el que habla del proceso de grabación de ese disco en pequeños estudios caseros y afirmaba que la música le había ayudado a encontrar su lugar en el mundo y a sentirse por fin a gusto en su propia piel.
El videoclip, que se grabó en una playa de Malibú con unas temperaturas muy poco veraniegas, también definió el estilo que Christina convertiría en su sello de identidad durante esa primera etapa de su carrera: con pantalones de talle bajo y camisetas que dejaban al aire su ombligo y que se convirtieron en una plaga entre las jóvenes de su generación.
“En aquella época todavía le seguía el juego a los grandes sellos. Iba a pruebas de vestuario en las que ciertos miembros de la compañía lo observaban todo y decidían qué se aprobaba y qué no. Era muy restrictivo, y me hacía sentir como una especie de Barbie… pero era el precio a pagar y al menos la jugada salió bien y se convirtió en mi carta de presentación. Y ahora que lo pienso tampoco estaba tan mal”, aclaraba hace un año en conversación con la revista W para dejar claro que ella no tuvo ni voz ni voto a la hora de elegir sus icónicos pantalones naranjas y el top adornado con piedras azules que lucía en ‘Genio In A Bottle’.