El vino emborracha más por culpa del cambio climático
El aumento de las temperaturas en todo el mundo ha provocado que el contenido alcohólico de los vinos se eleve
La lucha contra el cambio climático es una batalla que debemos pelear todos, ya que el planeta se está destruyendo más rápido de lo que imaginamos.
Uno de los más recientes descubrimientos que han hecho los investigadores es que el aumento de las temperaturas en el planeta guarda una estrecha relación con las fechas de las vendimias y que podemos sacar muchas conclusiones a partir de esos datos.
Un estudio y análisis de la recolecta de la uva en Francia ha servido a los investigadores para ver cómo ha evolucionado el cambio climático en los últimos años y cómo lo hará el futuro. La conclusión es que la temperatura afecta a las cosechas, también, por supuesto, a la maceración de la uva. Es decir, el sabor del vino podría cambiar.
Zonas como el sur de Francia enfrentarán veranos más calurosos, sin apenas lluvia según señala un reciente estudio que ha examinado datos del clima y cosechas desde el año 1354.
“Hasta ahora era extraño y atípico que los veranos fueran tan cálidos y secos, desde 1988 son casi una norma, muchos más desde el calentamiento global”, afirman los responsable del estudio, que ha sido fue publicado en la revista European Geosciences Union.
Según esta investigación, que analizó y verificó los datos de cosecha que se remontan a casi 700 años, las uvas se cosecharon, de media, a partir del 28 de septiembre. Durante los últimos años, las cosechas comenzaron 13 días antes.
El tiempo, cuando hablamos de uva y vino, es un dato a tener en cuenta. Y la temperatura del ambiente mucho más. Las uvas de vino son muy sensibles a la temperatura y a las precipitaciones, todo ello influye en su maduración.
La recogida de la uva debe producirse en unas fechas concretas. Si se hace más tarde, las uvas tienen demasiado azúcar, lo que significa que el vino será más alcohólico. Si se recogen prematuramente, es posible que no se haya desarrollado el equilibrio adecuado de productos químicos que dan al vino su sabor característico.
Los expertos señalan que la fecha de la vendimia se adelantará en los próximos años. “Podemos decir que en 2050, en muchas regiones vinícolas francesas, la vendimia se producirá alrededor del 15 de agosto, en pleno verano”, ha indicado a National Geographic Jean-Marc Touzard, científico del vino del Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas de Francia.
No hay duda de que todo esto afectará al sabor del vino.