Su esposa le llamó gordo, no podrás creer lo que hizo para “vengarse”
Lo importante en toda pareja es la comunicación y saber que los cambios no siempre tienen por qué ser malos, ni siquiera los físicos
Earl Stewart, originario del Reino Unido, se horrorizó cuando descubrió lo que su esposa, Bernie, había escrito sobre él en su diario.
A Bernie le gustaba escribir y dedicaba parte de su tiempo a escribir poesía, así que le dedicó un poema a su marido, en el que le llamaba gordo y destacaba su sobrepeso.
Está claro que es mejor no leer el diario ni nada de lo que los demás escriben, mucho menos si sospechamos que trata sobre nosotros. No solo viola la intimidad de quien lo escribió sino que también puede llegar a herir nuestra sensibilidad.
Por suerte, cuando Earl leyó el poema y se dio cuenta de que su mujer le veía como un hombre menos atractivo de cuando se conocieron decidió tomar cartas en el asunto, pero para bien.
Confiesa que no le resultó fácil echar un vistazo a los pensamientos privados de su esposa y descubrir lo que realmente pensaba de él, pero le dio fuerzas para iniciar una nueva etapa en su vida.
Y es que en el poema y diario de su mujer, en lugar de contar las mundanas noticias diarias, o describir en unas líneas cuánto lo amaba, Bernie realmente contaba la dejadez de su esposo sobre su aspecto. Era la verdad.
Describió a su marido como un “holgazán inútil con sobrepeso”, pero es que no esperaba que el leyera el poema y también lo hizo porque era una forma de desquitarse de todos los comentarios que el sí le había hecho a ella sobre su sobrepeso.
Bernie no esperaba que Earl leyera el poema, pero mucho menos esperaba que pasara lo que pasó después.
Tuvieron una gran discusión, por supuesto, pero cuando las cosas se calmaron llegó el proceso de venganza del esposo, que estaba realmente herido.
Earl, trabajador de la construcción, comenzó una dieta y a ejercitarse diariamente. Ha conseguido bajar mucho peso en tan solo tres meses, pero lo que es más increíble, ha adoptado una rutina de entrenamiento tan estricta que, ahora, solo puedes ver músculo en cualquier parte de su cuerpo.
Bernie, quien sigue escribiendo poesía para ayudarla a lidiar con el estrés, afirma que ella escribió el poema con esas duras críticas porque él mismo le señalaba que ella había subido de peso por los embarazos y que fluctuaba sobre la balanza desde entonces. Era duro para ella aceptar su aspecto y las palabras de su marido. Él la entendió mejor que nunca y le pidió disculpas, además se comprometió a ayudarla.
Ahora, ella también está decidida a cambiar su rutina de alimentación y ejercicio, ya come de forma saludable y ha bajado de peso.
A pesar del enfado inicial, la pareja se mantiene unida y consiguen motivarse mutuamente para conseguir sus objetivos.