Las características que hacen de un penthouse las viviendas más deseables para los millonarios
Los áticos de los edificios más altos de las grandes ciudades son muy cotizados
Originarios de la década de 1920, los penthouses cobraron relevancia entre la alta alcurnia debido a que reflejaban su poder y estatus económico al estar en la punta más alta de los edificios de las grandes ciudades, convirtiendo estas pequeñas viviendas en lujosos y codiciados apartamentos con impresionantes vistas de la ciudad en donde se encuentran.
Hoy en día, el término ha adquirido mayor relevancia y amplitud, no sólo en la cuestión del tamaño de la residencia, sino en su ubicación dentro de los edificios, siendo la unidad más grande, elegante, compleja y costosa, y no precisamente estar ubicada en lo que se conocería como el ático del complejo.
“La intención original era que un penthouse fuera un apartamento único en el último piso en un edificio alto que se sentía como una casa privada, pero desde la perspectiva del consumidor, esa definición ha cambiado”, dijo Ellie Johnson, presidente de Berkshire Hathaway Home Services New York Properties . “Ahora es más la expectativa de que va a ser un espacio espectacular con magníficas vistas, pero no necesariamente la cima del edificio”.
En medio de la competencia en el mercado inmobiliario, los compradores ya no sólo buscan la privacidad y las grandes vistas de un ático lujoso, sino que esperan recibir a cambio servicios tipo hotel, tecnología sofisticada para un hogar inteligente, entre otras cualidades por los millones que están dispuestos a pagar.
El gusto de los millonarios se vuelve un camino sinuoso para los desarrolladores, mientras algunos esperan que su penthouse sea diseñado por arquitectos de renombre en colaboración con marcas de lujo en su interior, los hay que prefieren algo más discreto y con la capacidad de adaptar el espacio con su propio toque personal tal si fueran lienzos en blanco.
Asimismo, el diseño y demanda de los penthouses pueden diferir dependiendo de las ciudades en las que se encuentran. En Miami, por ejemplo, los compradores buscan residencias ya equipadas con todos los muebles y accesorios para su confort que puedan servir como casas de vacaciones e incluso puedan recibir servicios de tipo hotel. Por su parte, en Manhattan la preferencia puede variar de una zona de moda al centro, porque hay algunos vecindarios donde la vista es importante como aquellos que se encuentran cerca de Central Park, mientras que, en otros, la vista y los pies cuadrados son lo de menos, siempre y cuando la exclusividad, privacidad y lujo estén a su servicio.