¿Por qué nos fascina tanto ingerir grasas?
El atractivo de las grasas está relacionado con nuestro cerebro y cómo procesa los sabores
Nuestro gusto particular por alimentos con grasa tiene implicaciones profundas con nuestro cerebro y cómo procesamos los sabores y sensaciones. Si quieres conocer más sobre por qué la grasa nos parece tan atractiva, el siguiente artículo te parecerá muy interesante.
Todo está en el cerebro
Un artículo de ¡Hola! indica que el sabor de los alimentos no se percibe solamente en la boca, sino también en el cerebro, particularmente en los centros de recepción sensorial ubicados en el lóbulo parietal. Estos centros interpretan la información y “declaran” si un sabor es agradable o no para nosotros.
Las grasas nos son agradables porque su presencia intensifica el sabor de los alimentos, y son elementos que aumentan la experiencia gustativa que percibe nuestra boca.
Por otro lado, la grasa es muy barata y accesible de producir, un fabricante que desee que su producto sea atractivo para el público solo debe introducir una alta cantidad de grasa y sal para tener éxito.
Varios de los alimentos “deliciosos” tienen un alto porcentaje de grasa en su contenido. Salchichas, papas fritas, quesos, jamón, helados, hojaldres, entre otros, tienen un contenido de grasa que nuestro cerebro y lo hacen juzgar que dicho alimento es sabroso.
Riesgos de consumo de grasas
El consumo excesivo de grasas saturadas es un riesgo de salud, algo que no es un secreto ni motivo de sorpresa. Se sabe, por ejemplo, que las grasas saturadas son un notable estimulante de obesidad.
Consumir grasas en exceso está relacionado también con una mayor presencia de grasa en la sangre, una situación que puede desembocar en la formación de tapones de grasa en el torrente sanguíneo y que, en casos extremos, pueden generar diferentes episodios cardíacos.
Una dieta equilibrada exige que balancees el consumo de grasa con componentes más sanos de manera que tu cuerpo reciba los nutrientes que necesita para gozar de bienestar. Tu plan de alimentación debe ser revisado por un nutricionista para garantizar de que sea viable para tu organismo.