Investigadores trabajan en la vacuna contra COVID-19

Pese a que todavía no hay una cura para el coronavirus y algunos estiman que podría tomar hasta un año para que se apruebe una, un instituto Israelí dijo que podría tener la solución en cerca de 90 días.
El coronavirus (COVID-19) es considerada una mutación de un virus que apareció en diciembre de 2019 en Wuhan, China.

En EEUU hasta el momento se han reportado más de 1,200 casos incluyendo celebridades como el actor Tom Hanks y su esposa Rita quienes dieron positivo a la prueba el miércoles en Australia.

En una lucha para atacar el problema, el Instituto de Investigación Migal, en la Galilea, anunció esta semana el desarrollo de una vacuna contra el coronavirus, según indicó el ministro de Ciencia y Tecnología israelí Ofir Akunis.

El grupo de investigadores comenzó su trabajo desarrollando una vacuna contra la gripe aviar, que se utiliza ahora por defecto con cada ave que nace en Israel así como en muchos otros países.

En cuanto comenzó a difundirse informaciones sobre la mutación COVID-19, los investigadores aseguraron que ya tenían mucho terreno ganado.

“Nuestro objetivo básico era desarrollar la tecnología general y no específicamente una vacuna para este o aquel tipo de virus”, dijo el Dr. Chen Katz, jefe del departamento de biotecnología del Instituto Migal.

“El marco científico de la vacuna se basa en un nuevo vector de expresión de proteínas, que crea y secreta una proteína quimérica soluble que entrega el anticuerpo viral a los tejidos de la mucosa por endocitosis auto activada, haciendo que el cuerpo forme anticuerpos contra el virus”.

En los ensayos preclínicos, el equipo demostró que la vacunación oral induce altos niveles de anticuerpos específicos contra el virus aviar, dijo Katz.

Después de que los científicos secuenciaran el ADN del nuevo coronavirus que causa el actual brote mundial, los investigadores del Migal coincidieron en que el coronavirus de las aves de corral tiene una gran similitud genética con la variante humana, además de que utiliza el mismo mecanismo de infección, lo que aumenta la probabilidad de conseguir una vacuna humana eficaz en un período de tiempo muy corto, señaló el David Zigdon, gerente del laboratorio.

“Todo lo que tenemos que hacer es ajustar el sistema a la nueva secuencia”, informó Katz. “Estamos en medio de este proceso y con suerte en poco tiempo tendremos la vacuna en nuestras manos”.

Una vez desarrollada la vacuna ésta tiene que pasar un proceso regulatorio, que incluye ensayos clínicos y producción a gran escala.

Será una vacuna oral, lo que la hará particularmente accesible al público en general, dijo Zigdon.

“Actualmente estamos en intensas discusiones con socios potenciales que pueden ayudar a acelerar la fase de ensayos en humanos y acelerar la finalización del desarrollo del producto final y las actividades regulatorias”, añadió.