Panga: ¿por qué no debemos comer este pescado?

El panga es un pescado cuyas características no lo hacen precisamente favorable para el bienestar humano. Si quieres saber por qué el panga amerita un consumo cauteloso, la siguiente información que hemos preparado te será útil.

Alta concentración de mercurio

El portal Mundo Deportivo de España, indica que el panga tiene una concentración de mercurio superior a la mayoría de los pescados, lo que fue descubierto por un equipo de investigadores que analizó algunas muestras superficiales de este pescado.

En determinadas muestras, los investigadores encontraron que la concentración de mercurio oscilaba entre los 0,51 hasta los 0,69 miligramos por kilo, lo que representa una enorme cantidad de mercurio en un alimento.

A pesar de esta alta concentración de mercurio en el panga, este pescado no brindará efectos negativos sobre tu salud si lo consumes de vez en cuando, dado que un consumo ocasional no le daría la oportunidad al mercurio de actuar nocivamente sobre el cuerpo.

Producción de panga

El área principal de producción de panga en el mundo ocurre en condiciones de cautiverio establecidas en el río Mekong, uno de los ríos más contaminados en el mundo, razón por la que el panga está en contacto continuo con agentes tóxicos.

Por otro lado, las condiciones de cautiverio generan que los ejemplares de panga compartan espacios reducidos en que hay interacción con residuos de alimentos y heces, lo que incrementa todavía más su toxicidad.

A pesar de que las autoridades ofrecen las garantías pertinentes alrededor del control sanitario de las pangas, algunos establecimientos comerciales han dejado de ofrecer este pescado para proteger a su clientela.

En conclusión, el consumo de panga no es aconsejable, pero no debería ser motivo de preocupación considerando que hay muchos otros tipos de pescado que puedes incluir en tu régimen regular de alimentación y que pueden suplir su aporte nutricional.