Miles de hispanos en Los Ángeles vuelven a sus puestos de trabajo con la reapertura de los autolavados
La medida anunciada por el alcalde Eric Garcetti hace algunos días brinda un alivio a los trabajadores y cabezas de familia de estos establecimientos
Como si se tratará de una cirugía para el coche, ahora los trabajadores de detallado y limpieza de autos usan máscaras, tapabocas e incluso guantes para volver al trabajo, sin embargo, para muchos los cambios no tienen importancia con tal de recuperar sus ingresos.
Miles de trabajadores hispanos han vuelto a sus puestos de trabajo esta semana luego de que el alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, diera luz verde para que estos comercios reiniciaran sus actividades comerciales.
Vera y más de una docena de trabajadores latinos han regresado al autolavado de Laguna Hills bajo una atmósfera inusual por los nuevos protocolos de seguridad, que incluyen guantes, tapabocas y la profusa utilización de desinfectantes.
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“Un cliente me dijo que nunca había visto tanta gente con máscaras. Es un poco incómodo, pero uno se adapta“, agregó Vera. Estar sanos es una prioridad y los trabajadores de este negocio se lavan las manos cada media hora y usan desinfectante, formas con las que, dice Vera, vencen el temor ante la nueva situación que “no sabemos cómo está”.
Por otra parte, el autolavado reabrió sus puertas ofreciendo a sus clientes, sin coste adicional, una desinfección inicial del vehículo, como resalta Mike Watson, gerente general de los siete locales que forman parte de la red.
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A los autos les aplican un desinfectante industrial que no está disponible al público en el mercado y que deja el interior del coche libre de bacterias y virus, incluido el COVID-19.
Estados Unidos sobrepasa la cifra de 1,57 millones de casos confirmados de COVID-19 y la de 94.000 fallecidos, de acuerdo con el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.