Garita de San Ysidro ampliará a 35 carriles el paso a California
Se espera que el proyecto reduzca el tiempo de espera en un 25% promedio y se calcula que estará listo para el mes de octubre.
El gobierno de México inició los trabajos para ampliar a 35 carriles el paso vehicular de Tijuana a California por la garita de San Ysidro.
El encargado de la obra, Jesús Felipe Verdugo, dijo en conferencia que se espera que la ampliación de ocho nuevos carriles reduzca tiempos de espera hasta en 25 por ciento en promedio.
“Obviamente esa reducción dependerá de que las autoridades estadunidenses abran todos los carriles y de sus prioridades de seguridad”, dijo Verdugo, delegado en Baja California de la Secretaría de Comunicaciones y Transporte (SCT).
De inmediato iniciaron los trabajos de demolición de la que hasta hace unos años era la salida de California a Tijuana por unos cuatro carriles, un paso vehicular conocido como la antigua Puerta México.
De acuerdo con datos oficiales, aún con las restricciones a viajes no esenciales, por la garita de San Ysidro cruzan diariamente unos 40 mil conductores particulares cada mañana en dirección a California.
“Esos mismos conductores regresan después por las tardes a Tijuana y Baja California”, destacó Verdugo.
La cifra aumenta considerablemente en fines de semana y puentes o periodos de días de descanso en California.
“En fines de semana con días festivos se alcanzan los 60 mil autos por día” al regreso a California, de acuerdo con Verdugo.
Ese alto flujo confirma que la garita de San Ysidro es no solo la más transitada de las 42 que unen a México y Estados Unidos, sino que como define el Departamento de Comercio, es el punto fronterizo más transitado en el mundo.
De acuerdo con estimaciones de la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) hasta 35 mil peatones cruzan diariamente a California, por ahora por uno de los dos pasos peatonales, el otro sigue cerrado pos las restricciones a cruces fronterizos innecesarios o no esenciales.
En la obra trabajan 120 obreros y la SCT estima que al menos otros 360 participarán indirectamente.
El trabajo de ampliación es un plan escalonado para que no se tengan que cerrar los carriles vehiculares que ahora están en operaciones en la garita.
Verdugo estimó que la ampliación quedará lista en el mes de octubre. El plazo coincide con fechas en que tradicionalmente han cruzado la frontera mexicanos fronterizos a hacer compras por el viernes negro y el periodo de ventas navideñas, aunque esa costumbre dependerá este año del desarrollo de la pandemia.
Alfredo Ruíz, un conductor de Tijuana que cruza la frontera regularmente por los “carriles normales”, los más lentos, dijo que si, como se contempla la obra de ampliación, los nuevos carriles servirían para el paso de vehículos en la sección más lenta, sería de gran ayuda.
“Al salir de casa siempre calculo que para cruzar voy a hacer entre dos horas a dos horas y media; claro que restarle 25 por ciento a ese tiempo de espera me ayudaría. Mire, por lo menos me dormiría un momentito en las mañanas”, dijo Ruíz, quien a diario cruza para ir a trabajar.
Pero Verdugo insistió en que tener esa reducción en tiempos de espera “no depende tanto del número de carriles, sino de la disponibilidad” de que al lado estadunidense de la frontera “tengan todas las casetas abiertas con todo el personal” de inspección.
El delegado o representante de todo el gobierno federal mexicano en Baja California, Alejandro Ruíz Uribe, confirmó que el proyecto estaba previsto desde hace al menos seis años pero fue hasta ahora que se otorgó presupuesto para hacerlo.
“De aquel lado se lograron poner de acuerdo en el proyecto de crecimiento que tenían, y acá no nos hemos podido poner de acuerdo totalmente”, dijo Ruíz Uribe en relación a los adelantos del proyecto en Estados Unidos.
El delegado Ruíz explicó que la apertura de 35 carriles de paso a California reafirma la visión de que Tijuana y Baja California son tierra de inmigrantes vinculada con el sur de California.
“Al salir de casa siempre calculo que para cruzar voy a hacer entre dos horas a dos horas y media; claro que restarle 25 por ciento a ese tiempo de espera me ayudaría. Mire, por lo menos me dormiría un momentito más en las mañanas”.