Cómo realizar un poderoso círculo de protección contra las envidias
Un círculo de protección sirve para prevenir los daños causados por las malas energías o para repeler aquellas que ya han comenzado a afectar
El círculo de protección bloquea las malas energías. Crédito: mohamed Hassan | Pixabay
La energía negativa que emanan las personas, producida por sentimientos como la envidia, el coraje o el rencor, puede llegar a perjudicar nuestro entorno. No podemos cambiar la forma de pensar de los envidiosos, pero lo que sí está en nuestras manos es protegernos de sus malas vibras.
Un círculo de protección es un ritual muy efectivo que nos ayudará a mantener a raya la envidia y todo lo que de ella se produzca. Sirve como un método de prevención si consideras que no eres objeto de envidias y es muy poderoso eliminando la mala energía de las miradas corajudas de quienes no pueden ver que seamos seres felices y luminosos.
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¿Qué necesitas?
- Una vela amarilla, que representa al elemento aire
- Una vela roja, en representación del fuego
- Una vela azul, identificada con el agua
- Una vela verde, relacionada con la tierra
- Una brújula
Procedimiento
Elije un lugar en tu casa donde tengas espacio para colocar las velas en el suelo, pues dibujaremos un círculo imaginario lo bastante grande como para que quepas en él. Ayúdate de la brújula para colocar las velas de la siguiente manera: amarilla dirección Este, roja en el Sur, azul en el Oeste y verde en el Norte.
Contigo dentro del círculo, prende con un fósforo la vela de color verde, es decir, la que está en el Norte; camina en el sentido de las manecillas del reloj y enciende cada una de ellas.
Ubícate en el centro de tu círculo imaginario, mirando al Norte, concéntrate en tu respiración mientras visualizas a las personas que consideras podrían tener envidia hacia ti; imagina que todas ellas salen del circulo donde estas y no pueden pasar. Reza una oración y pide al Universo que la mala energía que producen esas personas no afecte tu entorno y que la trasmute a energía positiva.
Cuando acabes camina tres veces con dirección contraria a las manecillas del reloj, es decir, de izquierda a derecha, y en la última vuelta apaga todas las velas. Recuerda que no debes soplar, usa un apagavelas o humedece tus dedos. Cada que consideres necesario haz este ritual para renovar tu círculo de protección.
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