¿Cuáles son las ventajas del ejercicio al aire libre a bajas temperaturas?
Los ejercicios al aire libre pueden incidir positivamente en nuestro estado de ánimo
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Un razonamiento habitual es que hacer ejercicio al aire libre a temperaturas bajas puede disminuir o dificultar nuestro rendimiento, pero poco se piensa sobre los posibles beneficios que esta práctica puede brindarnos. Hablaremos de ellos a continuación.
Beneficios del ejercicio al aire libre a bajas temperaturas
Según el portal Curiosidades Curiosas, la mezcla de deportes, naturaleza y baja temperaturas fortalece el corazón como consecuencia de su necesidad de bombear sangre continuamente para mantener la temperatura del cuerpo.
Junto con el fortalecimiento cardíaco, el cuerpo se ve obligado a quemar las calorías acumuladas, que sirven como un depósito de energía que el cuerpo tiene a su disposición en determinados casos.
El ejercicio al aire libre y en bajas temperaturas fomenta la exposición al sol por parte del cuerpo. Esta exposición es positiva porque nos permite absorber la vitamina D asociada con los rayos del sol.
Entrenar al aire libre y a bajas temperaturas es una actividad que puede mejorar nuestro humor al ocurrir una importante liberación de endorfinas, que son hormonas relacionadas con nuestro estado de ánimo.
Precauciones para el ejercicio al aire libre
Entrenar al aire libre con bajas temperaturas requiere que tengamos ciertas precauciones para que el clima no nos afecte demasiado.
En primer lugar, es necesario contar con algún tipo de abrigo que reduzca nuestra exposición al frío. Este abrigo puede ser incómodo para la actividad que quieras realizar, por lo que tienes que definir qué harás en exteriores para así elegir el abrigo más adecuado.
También sería adecuado que lleves contigo alguna bebida caliente que te ayude a reponer tu temperatura corporal en caso de que tu abrigo no sea suficientemente. Una bebida que puedes llevar puede ser chocolate caliente.
Si consideras hacer ejercicio al aire libre, debes primero consultar tu decisión con tu proveedor de atención médica para garantizar que esta práctica no será perjudicial para tu salud. De este modo, garantizarás que lo que recibas de esta práctica será beneficioso para ti.
