Negocios exigen atender en interiores, pero juez de San Diego dice que no
Magistrado indica que la salud y las vidas de la comunidad están primero que cualquier pérdida económica
Diversos propietarios de negocios protestaron frente al edificio de gobierno de San Diego. Crédito: Manuel Ocaño | Impremedia
Un juez en San Diego determinó esta semana que las pérdidas económicas de algunos negocios, por cerrar durante la pandemia, son menores si se comparan con el costo en salud que los sandieguinos tendrían que pagar si continúan la atención al público en el interior de sus establecimientos.
El juez superior Kenneth Medel falló en contra de cuatro lugares, entre restaurantes y gimnasios, que pedían una orden de restricción colectiva temporal contra el condado de San Diego y el estado de California para continuar sus operaciones en interiores.
“El impacto en la salud pública de desmantelar una parte de la estrategia diseñada para reducir la propagación del COVID 19 en la comunidad supera el daño económico a los demandantes”, determinó el magistrado.
El juez revisó lo que presentó en audiencia virtual el fiscal general adjunto de California, Jonathan Eisenberg, quien dijo que los negocios que demandan excepciones a las medidas de protección ignoran deliberadamente las circunstancias de la pandemia en el estado.
“Estamos en medio de un aumento sin precedentes de casos; las cifras empeoran sin parar”, agregó y caracterizó a la pandemia actual en California como “fuera de control” por lo que se debe continuar con las restricciones”.
En contraste, el abogado que representa esos negocios en la corte, Bruno Katz, dijo que la información en que se basa el estado y el condado para prohibir la atención en interiores —refiriéndose a la clasificación de nivel púrpura en la escala de alerta— “es ciencia basura”.
Indicó que el plan de reapertura del estado “aplica restricciones a restaurantes y gimnasios de una manera arbitraria”, que —según dijo— “la ciencia no respalda”.
Si la corte aceptara conceder la orden de restricción colectiva a los cuatro negocios, entonces todos los demás negocios que se oponen en San Diego al cierre temporal de operaciones en interiores se sumarían a la petición, incluso serviría como precedente para demandas similares en otros condados.
Los negocios que demandaron fueron lso restaurantes Encinitas Home and Away y Cowboy Star, y los gimnasios Bear Republic y FitAtletic Club.
Esos negocios argumentaron que, si tienen que volver a cerrar sus puertas a la atención en interiores, corren riesgo de registrar tantas pérdidas que les sería imposible continuar operando.
Jon Weber, copropietario del restaurante Cowboy Star, dijo sentirse afligido por la decisión de la corte.
“Nuestra planta depende y confía en nosotros, pero con las opciones imitadas de hacer negocios, no será posible seguir… Me parece un poco injusto porque hay otros tipos de negocios que sí atienden al público en interiores”.
Los únicos negocios que continúan la atención en interiores son los clubes de bailarinas que hacen desnudos, pero porque presentaron también una demanda y la resolución sigue pendiente, con autorización para continuar abiertos mientras se resuelve.
El condado de San Diego tiene esta semana una tasa de contagios del 7%, con un incremento de 2.2% en los últimos 14 días. Este martes había 493 pacientes hospitalizados por COVID 19 y tenía disponibles 237 camas para urgencias por la pandemia.
Van 13 días consecutivos en que se registran más de 600 nuevos casos positivos diarios.
“Ahora más que nunca es vital que San Diegans evite las reuniones y las multitudes, use mascarilla en público y se quede en casa si están enfermos”, dijo la doctora Wilma Wooten, oficial de salud pública del condado.
Advirtió que “El virus está muy extendido y que todos los elementos de nuestra comunidad se ven afectados”.
La acción legal de los restaurantes y gimnasios que piden orden de restricción surgió tras una protesta que docenas de propietarios de negocios realizaron ante el edificio de gobierno del condado la semana pasada.
El supervisor republicano del condado, JimDesmond, dijo aquel día que las medidas que ordenan las autoridades de Salud tienen un peso emocional en los residentes de San Diego.
Según indicó, por las medidas preventivas ante la pandemia, “nuestras sobredosis de drogas se están triplicando; se registra un aumento sustancial en intentos de suicidio, en abuso físico y en abuso sexual”, aunque evadió hablar de la pandemia.
