Dios los cría y Andrés Calamaro los une
El artista imaginó a cantantes de varios países, géneros y generaciones interpretando sus temas más conocidos, y lo hizo realidad en su último disco
El nuevo disco de Andrés Calamaro fue una mera ocurrencia, así como suele pasar con muchas ideas maravillosas de grandes creadores. “Dios los cría” nació como consecuencia de otro álbum, “Romaphonic sessions”, un disco que no tuvo repercusión sino hasta que el cantante argentino hiciera “Licencia para cantar”, la gira para promoverlo.
Durante los ensayos, en los que lo acompañaba un trío –piano, contrabajo y percusión–, Calamaro imaginó a cantantes de varios países, géneros y generaciones interpretando sus temas más conocidos, así como otros que sería bueno descombrar. Luego surgieron nombres y más nombres, hasta quedar los que están.
“Todos son artistas que cualquiera querría tener de invitados en un disco”, escribió el artista de vuelta en un correo, porque no es muy dado a dar entrevistas habladas.
Así es como “Dios los cría” terminó con figurones de la talla de Julio Iglesias, Alejandro Sanz y Milton Nascimento. Pero también con voces maravillosas como las de Mon Laferte, Lila Downs, León Gieco, Juanes y Vicentico. Sebastián Yatra, Raphael, Julieta Venegas y Carlos Vives también se unieron al proyecto. Al respecto, esto fue lo que comentó el intérprete de 59 años.
¿Qué inspiró este disco?
No sé en qué se inspiran los discos; creo que es la suma de un equipo inspirado de músicos y arreglos, de la libertad de tocar y cantar como cada uno lo siente; en este caso la posibilidad de convidarnos con cantantes de arte, muy buenos y contrastados.
¿Por qué a estas alturas de tu carrera?
Grabamos “Dios los cría” promediando la gira Licencia para cantar y antes de grabar Cargar la suerte. La gira nos estaba gustando y conectamos con [el productor] Carlos Narea, que fue la llave para que este álbum sea posible, conectando tantos cantantes bajo una misma bandera. Creímos que era buena idea, artísticamente. Que estábamos grabando música buena, que tenía sentido.
¿En qué te basaste para escoger a tus invitados?
En el deseo y la oportunidad. Finalmente son los cantantes los que escogieron grabar con nosotros. Todos son artistas que cualquiera querría tener de invitados en un disco.
¿Todos esos temas estaban planeados desde el principio o fuiste agregando?
Empezamos sin intenciones, ni buenas ni malas. Grabando lo mismo que estábamos tocando live, quizás el mismo repertorio que tocamos en Los Angeles. Luego sí agregamos más repertorio. Finalmente decantaron las canciones que encontraron intérpretes.
¿Cuántos de tus amigos cantantes se quedaron fuera de este proyecto?
No recuerdo el número exacto.
¿Con qué artista que ya no está vivo te hubiera gustado grabar un dueto?
Con Pappo. Norberto Napolitano.
En varias entrevistas te declaras feminista “desde antes de nacer”. ¿Cómo explicas eso y por qué? ¿Quién influenció tu vida en ese sentido?
Provengo de una familia feminista y atea; lo eran mi padre y mi abuelo. Lo normal, el ambiente en donde hemos crecido influye en la forma en como somos, en la clase de personas culturales que somos, la buena educación y el estilo.
¿Veremos alguna publicación tuya pronto? Si es así, ¿qué será y sobre qué?
No lo sé, me gusta escribir pero no tengo afán por publicar. Tengo escritas cosas para cine pero se presenta complicado; el cine es otro mundo. Estamos con una exposición de fotos que ya colgamos en Madrid y permanece interactiva.
¿Cómo llevaste todo este rollo de la pandemia?
Bastante bien, quedarme en casa no es un mal plan para mí. Fui un creador moderado pero experimental, bajé de peso y me mantuve antidepresivo.
Hay gente en Los Angeles que consideró que tu último concierto por acá fue muy corto. Ahora que regreses a los escenarios, ¿extenderás la duración de tus shows?
Eso se lee como un elogio; tocamos lo que nos parece bien y lo damos todo en la medida de lo posible; no hay dos conciertos iguales. Que un concierto resulte corto es una buena señal a menos que sea el teatro que se incendia.