California estudia ofrecer cupones de alimentos a inmigrantes indocumentados
Avanzan las negociaciones para aprobar la iniciativa que podría comenzar en 2023 y que beneficiaría a más de 2 millones de personas indocumentadas en California
El banco de alimentos a veces ofrece carne de cangrejo congelada y otras “carne” vegetariana. Antes del 4 de julio tenía pocos productos y se anunciaba que estaría cerrado por dos semanas.
Aunque nunca sabe exactamente lo que va a recibir, Lesli Pastrana está agradecida por el banco de alimentos Mercado El Sol. Lo visita desde que perdió su trabajo en enero.
Ella y su esposo viven en Estados Unidos sin papeles. Antes de la pandemia, se las arreglaban con sus salarios y los cupones de alimentos que recibían para sus dos hijos pequeños, ambos ciudadanos estadounidenses.
Pero ahora Pastrana perdió su empleo en una fábrica en la que trabajó 10 años, y a su esposo le redujeron la jornada laboral en un depósito a medio tiempo, por lo que la pareja debe ahorrar hasta el último dólar.
Cupones de alimentos adicionales podrían ayudar a aliviar la carga de Pastrana, pero, como todos los inmigrantes indocumentados en los Estados Unidos, ella y su marido no son elegibles para estos beneficios, a pesar de haber trabajado y pagado impuestos aquí.
Los demócratas estatales propusieron este año abrir el programa de cupones de alimentos financiados por el estado de California -que atiende a unos 35,000 inmigrantes autorizados que no cumplen los requisitos para recibir cupones de alimentos federales- a todos los californianos que reúnan los requisitos de ingresos, independientemente de su estatus migratorio.
El costo de la ampliación propuesta, a partir de 2023, sería de unos $550 millones de dólares al año.
Pero después de negociaciones con la administración del gobernador, Gavin Newsom, la propuesta se redujo a un proyecto de dos años y $30 millones que actualizaría el programa estatal de ayuda alimentaria para que pueda aceptar solicitudes de algunos de los más de 2 millones de personas indocumentadas en California, en caso de que el programa se extienda para abarcarlos en el futuro.
Un proyecto de ley, que se está considerando en la capital del estado, ampliaría el beneficio de los cupones de alimentos a los indocumentados una vez que se actualice el sistema y la legislatura haya asignado fondos para la expansión.
Por ahora, el estado no se ha comprometido a ampliar el programa. Pero los esfuerzos de los representantes políticos este año ponen a California a la vanguardia en la ampliación de la ayuda alimentaria para residentes sin papeles.
Los activistas dicen que el estado tiene la responsabilidad de ayudar a alimentarlos, especialmente porque cientos de miles de trabajadores agrícolas indocumentados trabajan en los campos de California, dando de comer al estado y al resto del país.
El programa sería caro y el estado tendría que pagarlo por completo. Ahora mismo, California cuenta con un superávit de $76,000 millones de dólares, pero los ingresos del estado pueden variar de forma brutal.
California ya ha ampliado la elegibilidad de los inmigrantes indocumentados para su programa de cobertura sanitaria Medicaid. Desde el año pasado, permite que los menores de 26 años participen si cumplen con los requisitos de ingresos, a un costo de unos $450 millones anuales.
A partir de 2022, serán elegibles los inmigrantes indocumentados de 50 años o más, y se espera que los gastos anuales del estado aumenten a 1,300 millones para el año fiscal 2024.
Para tener derecho a los cupones de alimentos en California, la mayoría de las familias tendrían que ganar el 200% o menos del nivel federal de pobreza según el tamaño de su hogar. Para una familia de cuatro personas, esto significaría ganar no más de $4,368 dólares al mes.