Asaltantes bien vestidos despojan a jardinero de su unidad y equipo de trabajo
Pide la ayuda de la comunidad para volver a comprar sus herramientas de jardinería
Era alrededor de las 6 de la mañana, cuando Eusebio Maldonado detuvo su troca en el estacionamiento de un restaurante de comida rápida en la ciudad de Downey del condado de Los Ángeles. No habían pasado ni 4 minutos cuando salió con su desayuno en la mano y se quedó en shock al ver que su vehículo con su equipo de jardinería había desaparecido como por arte de magia.
“Sentí que el mundo se me vino encima. Llamé a la policía. Vinieron en 20 minutos. Mi troca apareció por la tarde en Compton, con la chapa y la cerradura de la puerta y del motor de encendido deshechas. Mi equipo de jardinería ya no estaba”, dice.
El incidente ocurrió en las calles de Lynwood y Gallatin de la ciudad de Downey, el 15 de julio a las 6:10 a.m. cuando hizo un alto para comprar su desayuno antes de iniciar su jornada como jardinero a las 7 a.m.
Eusebio emigró de Puebla, México a los 18 años. Lleva más de 30 años en el país y por más de 20 años se ha dedicado a la jardinería en las ciudades de Whittier y Downey. Es padre de dos hijos: Jesús de 18 años y Yocelin de 15. Ayuda a su hijo mayor a pagar por sus estudios universitarios.
“Trabajo para una compañía de jardinería durante el día, y cuando salgo hago trabajos por mi cuenta. Ya saben que aquí en este país, uno vive para pagar las cuentas”. Ha logrado reunir una cartera de alrededor de 25 clientes.
Durante el atraco mañanero, Eusebio perdió máquinas de cortar el zacate y varios tipos de podadoras de arbustos cuyo costo suman los $14,000.
“Lo que más me duele además de la pérdida económica es que hasta ahora la policía de Downey no ha hecho nada. Yo soy quien está presionando al detective. Le llamo por teléfono y me contesta hasta 5 días después, solo para decirme que no ha tenido tiempo de ver los vídeos del robo”.
Eusebio cuenta que los videos muestran que quienes le robaron el vehículo con sus instrumentos de trabajo son latinos que se mueven en un auto Mercedes Benz. “Se ven bien vestidos, y también se observa que dentro del restaurante mientras yo ordenaba mi comida, había una mujer que estaba reportándoles lo que yo hacía. Ella salió y se ve como se sube al Mercedes Benz”.
Considera que sus asaltantes son gente experimentada en el robo de autos, porque en cuestión de 4 minutos ejecutaron el atraco.
“Todos me preguntan que si deje la llave puesta, pero no, el carro estaba cerrado”.
Eusebio está convencido de que en el área de Downey opera una banda de asaltantes que atraca a los trabajadores para robarles su equipo y sus unidades de trabajo.
“No soy el primero. Ya han asaltado a otros y andan armados. Necesitamos más vigilancia policiaca. Estamos viviendo un desastre. La zona está caliente y el papel de la policía es decepcionante. No hacen nada y no muestran interés en ayudar. Aunque no seamos ricos, tenemos derecho a que nos escuchen y a que se haga justicia”.
Relata que días antes del asalto, en las calles de Slauson y Telegram, él y otro compañero de trabajo, cuando descendieron de su auto para comprar comida, también fueron encañonados por un sujeto que les pedía bajo amenaza de muerte, que le entregaran todo el dinero que traía en sus carteras.
“Me quitó las llaves del carro, pero debido a que pasó otro vehículo, alcanzamos a escapar. Gracias a Dios, yo tenía un par de llaves de repuesto en la troca”.
En base a su experiencia, pide a la policía mano dura contra la delincuencia que azota a los trabajadores. “No es justo que los ladrones nos quiten nuestra fuente de ingreso; y menos en tiempos cuando andamos más necesitados. Nosotros no hemos recibido tanta ayuda del gobierno durante la pandemia”.
Eusebio hace un llamado a la comunidad angelina para que lo apoyen con donativos para comprar de nuevo su equipo de trabajo. “ Me robaron la inversión de mi vida; y he comprado lo que he podido de equipo, pero no es suficiente para trabajar y llevar el sustento a mi familia”.
Hace 2 meses perdió a su padre, lo que hace que este robo sea aún más difícil financiera y emocionalmente.
Para ayudar a Eusebio, visita el sitio de GoFundMe: