Pronostican alta participación en elección de destitución de Newsom

La secretaria de estado Shirley Nash Weber está haciendo todo lo que está en su poder para lograr una gran asistencia a las urnas durante la elección especial de destitución del gobernador Gavin Newsom, similar a la de la elección de noviembre.

“Estoy presionando mucho para que tengamos un mínimo de 80% de participación porque es una elección muy importante sobre quién va a ser el gobernador”, dijo durante la videoconferencia “Elecciones 101 – Educación del Votante sobre la destitución”, ofrecida por Ethnic Media Services

“Quiero que todos los californianos registrados para votar, participen en esta elección especial del 14 de septiembre”.

La pregunta fundamental es si quieres o no deponer al gobernador. “Si no quieres destituir al gobernador, no te preocupes de los otros candidatos”, recalcó.

Enfatizó que la elección es en dos semanas, el 14 de septiembre, y ya han recibido más de 3 millones de boletas por ausencia.

En la elección de destitución de 2003, se registró un 70% de participación.

Y también para asegurarse que todos voten, han mandado por correo una boleta a todos los votantes registrados. “Se ha incrementado la manera en que la gente puede votar, ya sea depositando la papeleta en un buzón o el día de la elección pueden ir a votar a las casillas”.

Dijo que la gente se ha dado cuenta que hay una elección el 14 de septiembre, cuando han abierto sus buzones y se han encontrado con la boleta.

La secretaria de estado atribuyó el número récord de boletas que ya se han enviado, a que esta papeleta no está llena de proposiciones como en otras elecciones.

“Es una boleta sencilla con solo dos preguntas: la primera pregunta claramente es, si quieres la destitución del gobernador Gavin Newsom. La respuesta es sí o no. Si tienes una preferencia debes ir a la pregunta 2”.

El 30 de agosto fue el último día para registrarse online para votar en la página web de la Secretaría de Estado. 

“Sin embargo, no es el último día que lo pueden hacer, ya que pueden registrarse para votar el mismo día de la elección el 14 de septiembre y votar con una boleta provisional porque tenemos que verificar que en verdad seas un individuo elegible, y una vez que la boleta sea validada, tu voto contará”.

Recordó que el gobernador no puede ser un candidato a elegir. Pero además de los 46 candidatos a reemplazar a Newsom, se podrá optar por escribir el nombre de otros candidatos que no aparecen en la lista en la boleta.

“Antes del 3 de septiembre, sabremos exactamente quiénes son los candidatos válidos y estarán disponibles para apuntarlos en la  boleta”.

Para un voto temprano, recomendó contactar al Registro de Votantes de los condados. 

“En el condado de Los Ángeles ya comenzaron a votar en las casillas que han abierto”.

Para que el voto por correo sea válido, la secretaria de estado dijo que la boleta debe tener el sello de correo del 14 de febrero.

La secretaria Weber alentó a todos a los que les ha enviado una boleta electoral, a que se aseguren de votar si quieren o no destituir al gobernador y entregarla.

Historia de la destitución

El doctor  Raphael Sonenshein, director del Instituto de Asuntos Públicos Pat Brown de Cal State Los Ángeles, dijo que el origen de la destitución viene de un movimiento de hace más de 100 años, que señalaba que los políticos no pueden ser responsables a otros políticos, sino directamente a la gente.

“Mucho de esto vino de la oposición al poder de Southern Pacific Railroad, cuyos representantes solían deambular por los pasillos de Sacramento, diciéndoles qué hacer a los legisladores y funcionarios estatales”.

Pero además había la sensación de que el sistema regular de elecciones estadounidense no era suficiente para dejar a la gente tener una democracia directa.

“A finales de 1800 y a principios de 1900, la destitución no estaba incluida. Existía la iniciativa que permitía a la gente aprobar una ley; y el referendo para eliminar una ley”.

Pero en la ciudad de Los Ángeles, en 1903, un movimiento local progresista impulsado por John Randolph, un doctor socialista, filántropo y rico, propuso la destitución.

El proceso de destitución despertó miedo en los funcionarios electos. “En 1903, Los Ángeles Charter incluyó la iniciativa, el referendo y la destitución que permitió a los votantes a través de una petición poner el asunto de sobrevivencia de un político electo en la boleta para removerlo”.

El doctor Soneshein dijo que se volvió muy popular y se difundió por toda California, en los gobiernos locales y el oeste del país. 

“En 1911, los votantes de California hicieron una enmienda para incluir la iniciativa, el referendo y la destitución en la Constitución”.

Desafortunadamente, no adoptaron una pequeña particularidad que LA Charter tiene, la cual permite una segunda vuelta en una elección de destitución para asegurarse que sea seleccionado al ganador por mayoría.

De acuerdo a las estadísticas de la Secretaría de Estado, de 179 intentos de destitución contra funcionarios estatales electos en California, solo 11 en 100 años, consiguieron las firmas suficientes para llegar a la boleta.

En esta elección de destitución, una cosa que va a ayudar, es que el gobierno estatal, está entregando boletas en ausencia a cada votante registrado de California. “Sin eso, la posibilidad de tener una votación alta se hubiera ido por la ventana”.

Precisó que es muy importante aclarar que la primera pregunta es: Debemos destituir al gobernador de California. Si contestas no, significa que estás apoyando al gobernador. Si votas sí, tendrás que escoger un reemplazo de una lista de 46 candidatos que aparecen en la boleta.

“Si el gobernador es destituido, eso significa que más de 50% votó para destituirlo”.

Aclaró que tampoco se puede votar a favor del gobernador poniendo su nombre en la boleta porque ese voto no va a contar.

También enfatizó que bastará con que alguno de los candidatos tenga el 15% de los votos para ser gobernador. “Es decir, que para ganar se necesita tener la mayor cantidad de votos no la mayoría”.

Si se elige un nuevo gobernador, gobernará hasta enero de 2023, cuando tome posesión el gobernador electo en noviembre de 2022.