Diabetes por enojo: te contamos la razón detrás de este conocido mito
Existe la creencia de que un enojo repentino es causa de las diabetes; pero la realidad no es tan sencilla y aquí te contamos por qué se cree que hay una conexión entre emociones fuertes y la diabetes
Es una de las creencias más arraigadas de dicha enfermedad. Crédito: Shutterstock
Una de las enfermedades que más vidas cobran al año en todo el mundo es la diabetes, un padecimiento que es producto de diversas fallas en el metabolismo o por la forma en cómo el organismo utiliza y aprovecha los alimentos.
Luego de años y años de estudio, hoy en día los médicos tienen un mayor conocimiento respecto a qué causa y cómo se puede presentar la diabetes en las personas que la padecen, conociéndose que existen 3 tipos.
La diabetes tipo 2 es la forma más común en las personas adultas, aunque está comprobado que también se puede presentar en niños. Este tipo de diabetes obedece a diversos elementos o factores de riesgo que predisponen al individuo a desarrollar este padecimiento.
Existen muchos mitos y creencias alrededor de esta enfermedad. Una de las más populares es que podrías hacerte diabético a causa de un enojo o coraje. Pero, ¿qué tan cierto es esto?
Diabetes por enojo, ¿verdad o mito?
En pleno siglo XXI, persisten muchas creencias respecto a este padecimiento y que pasan por generaciones y continúan arraigadas. Una de ellas es que la diabetes puede ser causada por un gran enojo y tal creencia impide en muchas ocasiones el control adecuado del tratamiento.
La respuesta es no. Si bien los niveles de glucosa pueden elevarse debido a un fuerte enojo, esto no ocasiona que las células beta del páncreas dejen de producir insulina, aunque suele coincidir que la glucosa aumente debido a las hormonas asociadas con el estrés.
Los especialistas de la Federación Mexicana de diabetes indican que es probable que una persona diabética no tenga síntomas previos, pero ya existe una falla o descompensación en el organismo; y cuando se enfrentan a un estado de alarma, estrés o cuando hay una emoción muy fuerte llámese un enojo, susto o impresión, el cuerpo produce hormonas como la adrenalina que actúan en contra de la insulina, lo que provoca que los niveles de glucosa se disparen.
Es así como se demuestra que no fue el enojo ni el estrés lo que provocó la enfermedad, sino que los niveles de glucosa ya comenzaban a tener alteraciones por las altas concentraciones y la emoción manifestada en ese momento detonó la enfermedad por los factores hormonales ya mencionados.
La principal causa de la diabetes es una mala alimentación combinado con el sedentarismo.
Te interesa:
Diabetes se duplica en los jóvenes latinos: qué alimentos aumentan su riesgo
