Mujer de 30 años diagnosticada con el VIH hace ocho, se curó, cuando su sistema inmunológico eliminó el virus sin medicamentos
La argentina denominada 'Paciente de Esperanza' es apenas el segundo caso conocido de recuperación sin recibir tratamiento, lo cual ofrece una esperanza para encontrar una cura contra la enfermedad, según los expertos
Una mujer que luchó contra el VIH durante años ahora está libre del virus, a pesar de no tomar ningún medicamento, revelaron el martes sus médicos.
La argentina de 30 años de edad, no identificada es a penas la segunda persona registrada en el mundo, cuyo sistema inmunológico ha eliminado el virus de forma natural en su cuerpo.
La ‘Paciente de Esperanza‘, como se la conoce, fue diagnosticada con VIH por primera vez en 2013, pero ahora tiene niveles indetectables del virus en su cuerpo.
Durante los primeros ocho años después de ser diagnosticada, no recibió ningún medicamento, excepto durante los seis meses en que estuvo embarazada, para asegurarse de que su bebé estuviera sano.
Los investigadores dicen que el descubrimiento alienta hacia una cura potencial para los 38 millones de personas que viven con la infección que causa el SIDA en todo el mundo.
Un grupo de médicos de Harvard anunció el descubrimiento en una importante reunión internacional de expertos en VIH en marzo.
Posteriormente, los médicos revelaron que la paciente, cuyo ex novio murió de SIDA, ya no tenía ningún virus causante de la enfermedad.
Los hallazgos ahora se han confirmado en la revista Anales de Medicina Interna.
El Dr. Xu Yu y sus colegas no encontraron rastros intactos del virus en los 1,500 millones de células sanguíneas y tisulares que analizaron.
Actualmente no se conocen otros detalles de la mujer, pero los médicos en ese momento la llamaron “atlética y hermosa” y revelaron que tenía un novio y un bebé recién nacido, ambos VIH negativos.
Solo se conoce a otra persona que también ha eliminado el virus de forma natural.
La historia de Loreen Willenberg se reveló por primera vez en agosto pasado.
La mujer de 67 años, de San Francisco, fue diagnosticada con VIH hace 30 años.
Los académicos afirmaron que podría ser “agregada a la lista” de pacientes con VIH curados, junto al paciente de Berlín Timothy Ray Brown y el paciente de Londres Adam Castillejo.
Tanto Brown como Castillejo tenían cáncer y recibieron un trasplante de médula ósea de un donante con genes resistentes al VIH para acabar con la enfermedad y el virus que causa el sida de una sola vez.
Pero ni Willenberg, ni la paciente de Esperanza, recibieron tratamiento.
Las dos mujeres son ejemplos de controladoras de élite, un grupo poco común de personas que nunca han tomado terapia antirretroviral, pero que no muestran signos del virus en la sangre.
Normalmente, cuando una persona se infecta con el VIH, el virus se adhiere al ADN de su célula inmunitaria y se reproduce desde allí.
La terapia antirretroviral puede ayudar a prevenir el proceso de replicación, pero no puede eliminar el VIH en el cuerpo por completo, lo que significa que las personas deben tomar un tratamiento diario para suprimir el virus.
Pero para una de cada 200 personas, los controladores de élite, la mayor parte del virus se instala en partes inactivas del genoma, conocidas como ‘desiertos genéticos’, sin causar daño. El virus restante es eliminado por el sistema inmunológico del cuerpo.
El Dr. Yu, médico residente del Hospital General de Massachusetts, dijo: ‘Estos hallazgos, especialmente con la identificación de un segundo caso, indican que puede haber un camino viable hacia una cura esterilizante para las personas que no pueden hacer esto por sí mismas.
“Ahora estamos buscando la posibilidad de inducir este tipo de inmunidad en personas en terapia antirretroviral mediante la vacunación, con el objetivo de educar a sus sistemas inmunológicos para que puedan controlar el virus sin la terapia”.
Escribiendo en la revista Annals of Internal Medicine, los investigadores agregaron: “La persona descrita aquí es originaria de la ciudad de Esperanza, Argentina.
“De acuerdo con sus deseos, proponemos referirnos a ella como la ‘paciente de Esperanza’ para enviar un mensaje de esperanza para encontrar una cura para la infección por VIH’.