Los crímenes que se resolvieron en 2021 gracias a análisis de ADN

Crímenes incluso de larga data pudieron ser resueltos gracias al trabajo con base en estudios genéticos que realizaron los expertos. Se trata de una muestra de que las técnicas de investigación y forenses dan resultados cuando se trata de buscar respuestas

Imagen de archivo de la realización de un estudio con base en ADN.

Imagen de archivo de la realización de un estudio con base en ADN. Crédito: Andreas Rentz | Getty Images

El año que terminó, crímenes incluso de larga data pudieron ser resueltos gracias al trabajo con base en estudios genéticos que realizaron los expertos. Se trata de una muestra de que las técnicas de investigación y forenses dan resultados cuando se trata de buscar respuestas.

Aquí un recuento de algunos de los crímenes resueltos gracias a estas técnicas de avanzada.

  • El caso de Minerliz Soriano, ‘Minnie’, de 13 años, ocurrió hace dos décadas. La pequeña fue estrangulada y su cuerpo arrojado a la basura en el Bronx, Nueva York. En noviembre pasado, una investigación de ADN condujo primero a la identificación de un testigo y luego al sospechoso, Joseph Martínez, de 49 años.
  • Kathy Gillcrist se realizó una prueba de ADN hace algunos años, para conocer a sus verdaderos antepasados. La mujer, que creció como hija adoptiva en el sur de Boston, se enteró en 2021 que era hija biológica de William Bradford Bishop Jr., un asesino.
  • Stephanie Isaacson, de 14 años, fue hallada muerta en un baldío de Las Vegas en enero de 1989. Entonces, en su ropa hallaron unas gotas de semen, y gracias a lo que se ha calificado como “un hito en la ciencia forense”, pudo saberse que el sospechoso de su agresión es un hombre que se suicidó en 1995.
  • Ernie Lapointe pudo confirmar que está unido en parentesco con el legendario jefe Toro Sentado, gracias a un análisis genómico del cabello. Constituye la primera vez que se usa ADN antiguo en la confirmación de un parentesco entre individuos vivos e históricos.
  • Las familias de dos bebés que nacieron en 2002 con apenas horas de diferencia en Logroño, España, supieron que estaban criando a la hija equivocada, tras una prueba de ADN. El recuento hecho por Univision da cuenta que existe una demanda contra el Ministerio de Salud por los daños morales que pudieron haber resultado del error.
  • Candy Rogers, de 9 años, fue asesinada en 1959 en Spokane, en el estado de Washington. Una muestra de semen en la ropa de la pequeña redujo a tres hermanos la búsqueda del sospechoso. La hija de uno de ellos colaboró en la investigación este año y la misma arrojó que era 2.9 millones de veces más probable que John Reigh Hoff, fallecido hace años, fuera el implicado.
  • Sun Zhuo, de 18 años, pudo reencontrarse con su padre Sun Haiyang, a quien le fue robado cuando el hijo tenía apenas 4 años. Una prueba de ADN pudo confirmar el parentesco entre ambos.

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