Mamá de ocho meses sufrió aborto espontáneo afuera de un hospital donde se le negó el tratamiento
Madre embarazada de ocho meses sufrió un aborto espontáneo fuera de un hospital en Xian, China, después de que se le negara el tratamiento mientras no se entregara una prueba negativa al Covid-19
Una madre embarazada de ocho meses sufrió un aborto espontáneo afuera de un hospital, después de que se le negara el tratamiento, durante el peor brote de Covid en China, denominado el encierro más estricto del mundo.
La mujer se vio obligada a esperar en agonía fuera de un hospital en la ciudad norteña de Xian, ya que no se le permitió el ingreso, hasta que se pudo probar que dio negativo en la prueba del virus.
En Xian, el régimen comunista chino busca controlar uno de sus peores brotes en una sola ciudad desde el comienzo de la pandemia con un bloqueo generalizado y restricciones draconianas.
La madre que abortó había llamado a una ambulancia después de sentir dolor en el estómago, según un relato publicado anoche en el microblog de Weibo.
Hasta obtener una prueba de coronavirus negativa, se dijo que la madre se vio obligada a esperar fuera de la atención de emergencia durante dos horas, hasta que el personal cedió cuando vio que estaba sangrando mucho entre las piernas.
En el mensaje, una sobrina de la mujer escribió: “(Los trabajadores médicos) la trasladaron a un quirófano al verla (sangrar gravemente).
“El bebé murió dentro del útero después de ocho meses de embarazo, debido al retraso en el tratamiento”.
El South China Morning Post informó sobre la publicación de seguimiento de la sobrina.
En ella dijo: “Mi tía me envió mensajes con su voz débil para pedirme que siguiera actualizando la publicación.
“Ella está de duelo y exige una explicación del hospital”.
La publicación, que había ganado millones de visitas, no se pudo acceder ya y no hubo respuesta a los mensajes de la cuenta.
Dentro de las medidas tomadas en Xian, las autoridades chinas allanaron docenas de casas en medio de la noche y obligaron a las personas a subir a autobuses rumbo a los campamentos de cuarentena.
A los 13 millones de personas que viven en la ciudad norteña de Xian se les ha prohibido salir de sus hogares, incluso por razones esenciales como comprar alimentos, para aplastar la marea creciente de infecciones por Covid.
No se sabe exactamente a cuántas personas se les ordenó salir durante el desalojo de medianoche, pero una persona informó haber visto 30 autobuses, mientras que otra afirmó que se trasladaron hasta mil personas, informó BBC News.
Las personas dijeron que los habían dejado esperando en los autobuses durante varias horas y que entre los trasladados a las instalaciones de cuarentena se encontraban personas mayores, niños pequeños y mujeres embarazadas, según los informes.
China ha registrado 131,300 casos y 5,699 muertes por coronavirus desde que comenzó la pandemia, pero sus ciudadanos se han enfrentado a algunas de las medidas más duras del mundo.
Xian, el popular destino turístico, es una de las ciudades chinas más grandes que ha sido bloqueada, desde que Wuhan fue sellada en enero de 2020, cuando comenzaron a surgir los primeros casos de Covid. Se han registrado un total de 1,451 casos en Xian desde el 9 de diciembre, el recuento más alto para cualquier ciudad china en 2021, lo que provocó el pánico entre las autoridades.
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