Hombre de Nueva Zelanda que golpeó, secuestró y abusó de niños sólo recibe 13 años de prisión

Un hombre que fue detenido el año pasado, luego de mantener durante cuatro días encerrado dentro de un automóvil a un niño de 9 años, fue sentenciado por un juez esta semana a tan sólo 13 años de cárcel, a pesar de haber golpeado, secuestrado y abusado sexualmente de otros cinco niños.

La historia de Riki Ross Kake, de 40 años alcanzó los medios de comunicación de todo su país por la crueldad con la que lastimó a varios menores de edad, lo sorprendente es que el acusado, recibió menos años de cárcel de los que tenía contemplado el juez (24), porque dijo: “Lo siento, viviré con esto el resto de mi vida”, su abogada logró reducir su sentencia.

En septiembre del año pasado, Riki Ross Kake fue detenido en un campamento de Amberley por las autoridades. El hombre fue acusado de mantener durante cuatro días y cuatro noches, encerrado en un vehículo sin comer ni bebe agua a un niño de 9 años, al cual golpeó en constantes ocasiones, detalló el diario Stuff.

Por cualquier motivo, le daba puñetazos y patadas, hasta llegar a ahorcarlo con sus manos y amenazarlo diciendo: “Quiero asesinarlo”. El menor de edad colapso y fue atendido por su madre. Después de este brutal acto, el hombre fue arrestado por la policía y puesto en custodia.

Riki Ross Kake, ya tenía 28 cargos de violencia en su contra entre ellos: asalto, secuestro, lesiones intencionales, estrangulamiento, conducta sexual con un joven menor de 16 años, conducta sexual con un joven menor de 12 años, intento de violación, violación sexual por conexión sexual ilegal, amenaza de muerte, acto indecente contra una niña de 8 años. Un total de seis víctimas a las que este hombre atacó.

Pero en la lista de denuncias también se agregó; incidentes de violencia hacia una ex pareja, quien recibió brutales golpes y patadas que le rompió dientes y hasta la hizo perder el control de la vejiga, compartió el mismo medio de comunicación.

Durante su comparecencia en el Tribunal de Distrito de Christchurch, algunas de sus víctimas se hicieron presentes, las cuales confesaron desgarradores declaraciones. El fiscal Pip Currie, dijo que el “horror” de la violencia había sido resaltado por las declaraciones de impacto de la víctima en la corte.

A pesar de que el juez Brian Callaghan, señaló que estaba claro que las horribles ofensas que Ross Kake hizo, causaron un daño emocional y psicológico significativo a todas sus víctimas, la sentencia quedó en el mimo número de años.

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