Lila Downs en el cielo de los artistas

Lila Downs regresó del encierro por la pandemia con ganas de hacer mucha, pero mucha bulla.

En México, por lo pronto, su nombre ya quedó grabado en el cielo de los artistas luego de que en marzo ofreciera dos conciertos en el Palacio de Bellas Artes, en Ciudad de México, un foro reservado solo para lo más emblemático de las artes del mundo.

“Fue una experiencia hermosa”, dijo la intérprete de 53 años. “Todo el pueblo estuvo conmigo”.

Lila se refería a que la acompañaron una banda de 25 miembros de una comunidad de Morelos, México; un coro de diez niños, un cuarteto de cuerdas, sus propios músicos y bailarines de danza folclórica.

Los conciertos, titulados Volver a Verte, estuvieron inspirados en la música de las comunidades rurales, y “fue una muestra de respeto a ese origen y a la música que nos ha tocado cantar”.

También la acompañó en esas dos noches el tenor mexicano Javier Camarena, con quien ya apalabró proyectos musicales y sociales.

La artista conversó desde un hotel en una ciudad al sur de Nueva Jersey, donde llegó unos días antes de iniciar An Evening With Lila Downs, su primer gira postpandemia por Estados Unidos, para visitar a la madre de su esposo y director musical de su banda, Paul Cohen.

El recorrido comenzó la semana pasada en Nueva York, y esta semana continúa por la costa oeste con shows en teatros de Tucson, en Arizona, y de San Diego, Santa Barbara y Santa Rosa, en California. A Los Angeles llegará el sábado y domingo con sendos conciertos en el teatro Luckman de la Universidad de California en Los Angeles.

A la par de su gira, la cantante está preparando dos discos, uno de música regional mexicana y otro de canciones originales –rancheras, boleros, huapangos, entre otros ritmos– “realizadas por ella. El primero incluye temas inéditos de autores jóvenes y el segundo temas también inéditos escritos por ella.

“Llevamos ya tres años sin presentar nada”, dijo. “Somos músicos de probar y hacer [música] en los conciertos; es difícil no haber tenido concierto para probar la música, y por eso se quedó mucha que compuse desde el principio de pandemia”.

Estas novedades no son las únicas que comparte Lila. Está feliz porque agregó un nuevo miembro a su familia. Se trata de Vanessa, una niña oaxaqueña que la artista adoptó hace unos meses.

“Hace tremendos berrinches”, dijo sobre la niña. “Es muy curiosa e inteligente”.

Lila también trabaja en varios libros; uno es su biografía y otro es un libro de cuentos para niños basados en leyendas oaxaqueñas. Su libro personal es a largo plazo, pero asegura que hablará de muchas cosas que ha vivido, no todas tan buenas como pareciera.

En Detalle:

Qué: Lila Downs

Cuándo: sábado 8 pm (boletos agotados) y domingo 6 pm

Dónde: teatro Luckman, 5151 State University Dr., Los Angeles

Cómo: boletos $55 a $75; informes luckmanarts.org