Chofer del tráiler donde murieron 53 inmigrantes sonrió a la cámara fronteriza
El conductor del camión donde murieron 53 inmigrantes pasó el punto de revisión de autoridades migratorios e incluso sonrió ante una de las cámaras de vigilancia; el hombre enfrenta cadena perpetua o pena de muerte
Documentos judiciales revelan más detalles del caso en el que murieron 53 inmigrantes cerca de San Antonio, Texas, como el hecho de que el conductor habría sonreído a la cámara de vigilancia al momento de cruzar el punto de revisión la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
La imagen de las autoridades migratorias fue compartida al Gobierno mexicano cuyo presidente, Andrés Manuel López Obrador, hizo público el momento en que Homero Zamorano, de 45 años, cruzó el punto de revisión fronterizo, donde se expresó sonriente.
La cámara captó el momento unas horas antes de que Zamorano abandonara el tráiler donde murieron 53 personas, 46 de ellas en el lugar, y el resto al ser atendidas por personal de emergencia.
El hombre, quien es residente de Texas, supuestamente no se dio cuenta de que el aire acondicionado había dejado de funcionar durante varias horas.
Zamorano fue arrestado el miércoles por cargos penales por su presunta participación en una red fallida de contrabando, según el Departamento de Justicia y la Oficina del Fiscal Federal para el Distrito Oeste de Texas.
Los documentos judiciales revelan como uno de los presuntos autores intelectuales a Christian Martínez, de 28 años, quien estuvo en contacto con Zamorano en todo momento, según el Departamento de Justicia.
Martínez sostuvo una conversación con Zamorano sobre “la muerte de varias personas” dentro del camión, lo cual admitió ante autoridades.
Los inmigrantes fallecieron de asfixia y calor, al haber estado encerrados en condiciones de casi 150 grados Fahrenheit.
“El camión con remolque frigorífico no tenía una unidad de aire acondicionado en funcionamiento visible, y no había señales de agua en el interior”, dijo el jefe de bomberos de San Antonio, Charles Hood.
Se trata de la mayor tragedia de inmigrantes registrada en la frontera, por la cual Zamorano y sus cómplices enfrentan cadena perpetua y hasta pena de muerte.