Un indicador clave de la Fed de Atlanta revelaría que EE.UU. ya estaría en recesión técnica

La economía de Estados Unidos estaría ya en una recesión técnica, según los datos de un indicador clave de la Reserva Federal (Fed) de Atlanta, que mostró una nueva contracción del producto interno bruto en el segundo trimestre del año.

El dato se obtuvo el 1 de julio pasado a través de la herramienta GDPNow, de la Fed Atlanta, que es considerada la más importante para el banco central para medir el crecimiento en tiempo real de la economía.

Según los datos, el PIB nacional se habría contraído un 2.1% entre abril y junio pasado, lo que significaría un segundo trimestre consecutivo con decrecimiento.

Según la teoría, la recesión se configura en una economía cuando el PBI se contrae en dos meses consecutivos, con lo que se estaría en una recesión técnica.

El dato es preliminar y se tendrá un porcentaje más preciso este jueves; no obstante, el dato oficial del comportamiento de la economía de EE.UU. se conocerá a finales de este mes.

No obstante, la decisión de si la economía del país entra en una etapa de recesión no será tomada por la Fed, sino por la Oficina Nacional de Investigación Económica (NBER), formada por un grupo de economistas de importantes universidades del país.

Se aleja la posibilidad de una “aterrizaje suave”

Los temores de una recesión se despertaron en abril pasado, cuando el reporte del comportamiento de la economía en los primeros tres meses del año mostró una contracción de 1.4%.

El dato surgió en medio de varios reportes mensuales de la Oficina de Estadísticas Laborales sobre una constante alza inflacionaria, que en mayo llegó a 8.6%, y de decisiones de la Fed de alzar su tasa base para controlar la escalada de precios.

Sin embargo, la estrategia de la Fed no solo fue cuestionada por haber comenzado tarde, sino que analistas de instituciones financieras consideran que el alza de las tasas llevará a una recesión hacia finales de año o principios de 2023.

Aunque hasta hace unas semanas, el presidente de la Fed, Jerome Powell, descartaba la posibilidad de una recesión, hace unos días, admitió que será muy difícil evitarla si se quiere controlar la inflación.

El reto de la Fed radica en desacelerar la inflación a través de una subida del precio del dinero que desincentive el gasto y enfríe la economía, pero sin que el impacto sea tan grande que provoque una contracción del PIB.

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