Trump y el FBI: claves sobre declaración jurada que juez de Florida ordena hacer pública
Un juez federal en Florida ordena al Departamento de Justicia hacer pública la declaración jurada que permitió al FBI justificar el operativo contra el expresidente Trump en Mar-a-Lago, pero el documento será muy limitado, debido al riesgo que fiscales federales han expuesto, se adelantó
Este lunes, el juez federal Bruce Reinhart ordenó al Departamento de Justicia revelar parte de la declaración jurada que justificó al FBI un operativo en la residencia del expresidente Donald Trump en Mar-a-Lago, Florida.
La decisión de este lunes no cambia el fondo de la decisión del juez Reinhart, quien la semana pasada escuchó los argumentos de los fiscales federales, quienes el jueves deberán presentar una propuesta sobre la versión pública del archivo, conocido como “un documento redactado”, es decir con cierta información protegida.
Sin embargo, la decisión de abre la posibilidad de que el documento tenga un estricto nivel de “redacción” que será difícil o casi imposible entender a qué se refiere.
“No puedo decir en este momento que las redacciones parciales serán tan extensas que darán como resultado una divulgación sin sentido, pero finalmente puedo llegar a esa conclusión después de escuchar más del Gobierno”, dijo Reinhart este lunes en su nueva orden.
Los fiscales federales todavía pueden presentar argumentos sobre la forma en que “sellarán” el documento, a fin de no revelar información estrictamente confidencial sobre el proceso judicial abierto.
Los abogados del Departamento de Justicia han defendido mantener sellado el documento, bajo el argumento de que su investigación está “en etapas iniciales”.
Cabe recordar que esta indagatoria es sobre los archivos que el expresidente Trump se llevó a su residencia en Mar-a-Lago, los cuales podrían incluir información clasificada y de seguridad nacional.
En su operativo, el FBI encontró varios archivos, los cuales está revisando, incluidas fotografías y documentos escritos a mano, pero que son oficiales, por lo que debieron estar bajo resguardo de la oficina de Archivos Nacionales.
Peligro para testigos
Los fiscales federales no quieren hacer pública la declaración jurada, ya que se pondría en riesgo a los testigos –algunos ya entrevistados–, además de revelar futuras acciones en la investigación.
El juez Reinhart se inclina por hacer público parte de la orden jurada, pero reconoce la necesidad de una “redacción” que evite poner en peligro a posibles testigos y la investigación.
“Es probable que incluso los testigos que no están expresamente nombrados en la declaración jurada sean rápidamente identificados en las redes sociales y otros canales de comunicación, lo que podría conducir a que sean hostigados e intimidados”, consideró el juez en su decisión de este lunes.
El expresidente Trump pide que haga pública la declaración jurada “en forma inmediate” y “sin redacción”, pero hasta el momento sus abogados no han tomado acciones adicionales.
El operativo del 8 de agosto en Mar-a-Lago desató críticas de varios republicanos hacia el Departamento de Justicia, pero algunos han sido más moderados, como el líder de la minoría en el Senado, Mitch McConnell (Kentucky), quien ha pedido explicaciones a los fiscales federales, pero sin acusar abuso de poder.