Contraofensiva ucraniana toma por sorpresa a Rusia y recupera 20 poblaciones en el noreste del país

Autoridades ucranianas anunciaron la liberación de 20 poblaciones de manos rusas en el noreste del país, en las afueras de Járkov, mientras sus militares presionan por recuperar la ciudad ocupada de Izyum y continúan una feroz lucha por Jersón en el sur.

Oleksiy Hromov, subjefe del estado mayor general de las fuerzas armadas de Ucrania, dijo el jueves que las fuerzas de su nación avanzaban hacia Donbás desde Járkov y habían penetrado más de 30 millas más allá de la línea defensiva de Rusia.

“Desde el comienzo de la semana, las Fuerzas Armadas de Ucrania, en cooperación con unidades de la Guardia Nacional y otras fuerzas de seguridad, han estado realizando operaciones activas en ciertas direcciones”, dijo, según el medio ucraniano Ukrinform.

“En el curso de las operaciones activas en la dirección de Járkov, se liberaron más de 20 asentamientos”.

Los videos que circulaban en las redes sociales el jueves afirmaban mostrar a las tropas ucranianas arriando una bandera rusa en Nova Husarivka, a medio camino entre la línea del frente y la ciudad de Izyum, un importante escenario ruso.

El video siguió a los informes de los separatistas rusos el miércoles sobre el contacto con el enemigo en Balakliya, justo al norte de Nova Husarivka, y el derribo de un avión ruso en Volkhiv Yar, incluso más al norte, la velocidad y la dirección del avance ucraniano apuntaban a Izyum como objetivo.

Los medios rusos no confirmaron la pérdida de las aldeas, pero sí citaron a combatientes chechenos leales a Moscú que afirmaron haber repelido un ataque ucraniano al otro lado de Izyum, cerca de las ciudades de Soledar y Seversk.

El líder checheno Ramzan Kadyrov, aliado de Putin dijo al noticiero ruso TASS que sus tropas habían derrotado un avance ucraniano.

La liberación de las aldeas señalaría un movimiento masivo en la guerra de seis meses.

“El comando ucraniano envía destacamentos de militares a misiones que son casi suicidas”, dijo Kadyrov.

“Esta imagen de soldados de las fuerzas armadas de Ucrania atacando imprudentemente nuestras posiciones se ha repetido por cuarto día y en numerosas ocasiones”, agregó.

Pero las ganancias ucranianas, si se confirman, representan una gran victoria para Kiev después de un estancamiento de meses tras la caída de Lugansk, la provincia norteña en el corazón industrial de la región de Donbás.

Si las fuerzas ucranianas toman Izyum, se espera que la medida corte una importante línea de suministro a un ejército ruso ya asediado en el Donbás.

El general brigadier ucraniano Oleksiy Gromov informó a los periodistas sobre los movimientos del noreste el jueves y elogió los drones Bayraktar de fabricación turca de lento movimiento de su ejército.

“Las unidades de infantería y artillería motorizada enemigas desprotegidas por los sistemas de defensa aérea se convierten en presa fácil para nuestros Bayraktars”, dijo.

Las victorias se producen después de semanas de las llamadas “operaciones de configuración” que prepararon el campo de batalla en beneficio del gobierno de Kiev, atacando puentes y rutas de suministro con artillería de cohetes de largo alcance de fabricación occidental, aislando a las fuerzas rusas de los suministros.

El ataque al flanco norte de Rusia parece haber tomado por sorpresa al Kremlin. Con la continua presión ucraniana sobre la región de Jersón en el sur, el ejército ucraniano ha dividido efectivamente la atención rusa en dos e interrumpido las líneas de suministro rusas entre los dos frentes.

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