Los latinos son una pieza clave para los republicanos en Florida
La última encuesta que realizó Florida International University, indicó que el Partido Republicano sigue siendo el favorito de los cubano-estadounidenses del sur de Florida
Los latinos en el estado de Florida ocupan el 27 % de la población, y pueden dar a los republicanos un triunfo completo en las elecciones del martes incluyendo Miami, un refugio demócrata que corre el riesgo de verse inundado por la “marea roja” para estas elecciones intermedias.
En la recta final de la campaña, la excongresista demócrata nacida en Ecuador, Debbie Mucarsel-Powell y el colombiano-estadounidense Jaime Florez, director de comunicaciones para hispanos en el Comité Nacional Republicano (RNC), hablaron si realmente hay un trasvase de latinos de Florida hacia el Partido Republicano.
Florez asevera que los hispanos se identifican más con los principios republicanos y se han dado cuenta que el Partido Demócrata los “ha venido utilizando y dando por descontado, sin realmente considerarlos”.
Mucarsel-Powell, por el contrario, ve una exageración decir que los latinos se van a pasar en masa a las filas republicanas, pero reconoce que el electorado latino de Florida se ha movido un poco a la derecha y lo atribuye en parte a la desinformación diseminada por las emisoras de radio conservadoras en español.
Con respecto a qué grado de responsabilidad tiene el Partido Demócrata para que los latinos miren a su rival, contestó que, “tal vez no ha entendido la complejidad política de este estado. Han preferido ignorar o no entender que se necesita trabajar e invertir para comunicarnos con los electores latinos”, subrayó.
Las encuestas corroboran que el Partido Republicano tiene ventaja en los puestos más importantes de los que están en juego en Florida en estas elecciones, como el de gobernador y del Senado.
También apuntan a la cantidad de republicanos que han votado por correo o anticipadamente en el condado de Miami-Dade, donde Biden fue el candidato más votado en 2020, pero ahora deje de estar pintado del azul del Partido Demócrata y Miami-Dade se “teñirá de rojo (republicano)“, augura Flórez.
Mucarsel-Powell mantiene la esperanza de que la ciudad donde se casó y tuvo a sus hijos y donde vive “gente sensata que busca el bien común no caerá en el extremismo republicano”.
La comunidad latina como conjunto apoya la reelección del gobernador Ron DeSantis y del senador Marco Rubio, ambos republicanos, pero básicamente son los electores cubanos, que constituyen la mayoría entre los hispanos de Florida, los que inclinan la balanza hacia ese lado.
Los puertorriqueños que son otro grupo importante y tienen sus candidatos, como Robert Asencio, que compite con el cubano Carlos Giménez por el sureño distrito 28 de Florida, se mantienen fieles a los demócratas.
Lo mismo pasa con los latinos originarios de países latinoamericanos, según coinciden las encuestas de las grandes cadenas televisivas en español. En todo el país los latinos siguen favoreciendo mayoritariamente a los demócratas, aunque el apoyo disminuyó en las elecciones de 2020 en comparación con las de 2016.
En Florida el 28 % de los latinos son cubanos y este grupo es casi un “voto cautivo” por los republicanos. La última “Cuba Poll” (encuesta Cuba), que realizó Florida International University, indica que el Partido Republicano sigue siendo el favorito de los cubano-estadounidenses del sur de Florida y que un 64 % votará por DeSantis y por Rubio.
El responsable de las comunicaciones para hispanos en el RNC vaticinó una victoria “muy contundente” de Ron DeSantis, que ha hecho una excelente labor como gobernador, y también una victoria de Marco Rubio sobre la demócrata Val Demings aunque más estrecha.
Florida no ha tenido un gobernador demócrata desde 1999, el año en que Kenneth H. MacKay le entregó el poder al republicano Jeb Bush. El hoy rival de DeSantis, el demócrata Charlie Crist, fue gobernador de 2007 a 2011 pero como republicano.
Jaime Florez desestimó las críticas de que la nueva configuración de los mapas electorales está hecha para favorecer a los republicanos y no dio importancia a las denuncias de que las radios hispanas de tendencia conservadora hacen “campañas de desinformación” en favor de su fuerza política.
“Esa es una tendencia de los demócratas, copiada del libreto socialista. Cualquier cosa con la que no están de acuerdo es desinformación”, criticó Florez.
Sin embargo, los diarios Miami Herald y el Nuevo Herald e investigadores de la Universidad Internacional de Florida (FIU) monitorean en esta campaña la radio y las redes sociales en español para buscar ejemplos de desinformación y no les han faltado como acreditan sus publicaciones.
“Sin duda, Florida dejará de ser un ‘swing state’ (estado variable)”, vaticina Florez. Y Mucarsel-Powell se pregunta qué pasará con el Seguro Social, el Medicare o el abaratamiento de los precios de medicamentos, si los republicanos ganan el control del Congreso el 8 de noviembre.