Muere hombre iraní que durmió en aeropuerto francés durante más de 18 años y que inspiró una película
Nasseri perdió la documentación que le acreditaba como refugiado durante una escala en París en 1988, por lo que no podía ni continuar su viaje ni salir del aeropuerto
Mehran Karimi Nasseri, el hombre que vivió durante 18 años en el aeropuerto parisino Charles de Gaulle y cuya historia inspiró la película La Terminal. Crédito: STEPHANE DE SAKUTIN | Getty Images
El refugiado iraní Mehran Karimi Nasseri, cuya historia de 18 años atrapado en el Aeropuerto Charles de Gaulle de París influyó en el guion de la película de Steven Spielberg “The Terminal”, murió en el propio aeropuerto.
De acuerdo a medios locales, el hombre murió después de un ataque al corazón en la Terminal 2F del aeropuerto.
Nasseri perdió la documentación que le acreditaba como refugiado durante una escala en París en 1988, por lo que no podía ni continuar su viaje ni salir del aeropuerto y por eso vivía en la Terminal 1.
Tras varios años de gestiones administrativas se le concedió un visado francés en 1999, aunque continuó viviendo en el aeropuerto, en un habitáculo bajo unas escaleras mecánicas.
El personal lo apodó Lord Alfred y se convirtió en una minicelebridad entre los pasajeros.
“Eventualmente, me iré del aeropuerto”, dijo en 1999, fumando una pipa en su banco, luciendo frágil con cabello largo y delgado, ojos hundidos y mejillas hundidas. “Pero todavía estoy esperando un pasaporte o una visa de tránsito”.
Nasseri nació en 1945 en Soleiman, una parte de Irán entonces bajo jurisdicción británica, de padre iraní y madre británica. Dejó Irán para estudiar en Inglaterra en 1974. Cuando regresó, dijo, fue encarcelado por protestar contra el sha y expulsado sin pasaporte.
Cuando finalmente recibió los documentos de refugiado, describió su sorpresa y su inseguridad al salir del aeropuerto. Según los informes, se negó a firmarlos y terminó quedándose allí varios años más hasta que fue hospitalizado en 2006 y luego vivió en un refugio de París.
Más tarde regresó al aeropuerto, donde recorría las instalaciones acompañado de un carrito en el que llevaba sus posesiones. Tras su muerte, los trabajadores del aeropuerto cubrieron el lugar donde solía sentarse con una sábana blanca.
En 2004 su historia llegó a la gran pantalla de la mano de Steven Spielberg, protagonizada por Tom Hanks y Catherine Zeta-Jones.
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