Pareja latina ostenta Récord Guinness de modificaciones corporales, mira cómo lucen
Los esposos cuentan con un increíble total de 84 modificaciones corporales
El tatuador uruguayo Víctor Hugo Peralta y su esposa, la tatuadora argentina Gabriela Peralta, posan para una foto Crédito: YASUYOSHI CHIBA | AFP / Getty Images
Las modificaciones corporales han cobrado mucha popularidad y nos han permitido ver a personas que han cambiado por completo su apariencia, como es el casi de una pareja de latinos que ostenta un Récord Guinness.
Gabriela Peralta (Argentina) y Víctor Hugo Peralta (Uruguay) son unos apasionados de los tatuajes y las modificaciones corporales y ostentan el título de Récord Guinness por el mayor número de modificaciones corporales (pareja casada).
Los esposos contaban con un increíble total de 84 modificaciones corporales, cuando el récord fue verificado por el show Récord Guinness de Italia en 2014.
Sin embargo, desde que se confirmó su récord en 2014, los enamorados han seguido tatuando y modificando sus cuerpos, por lo que el recuento ronda ya las 98.
“Para mí, ser poseedor de un Récord Guinness es un premio que me da la vida por el amor al arte corporal, y estoy muy agradecido porque este récord me ayudó a cumplir uno de mis grandes sueños: viajar a 20 países, conocer diferentes culturas y hacer nuevas amistades alrededor del mundo”, dijo Víctor Hugo Peralta en una reciente entrevista con Récord Guinness.
La historia de amor
Gabriela y Víctor se conocieron en Buenos Aires, Argentina, hace aproximadamente 24 años en un evento de motos, un acontecimiento que cambiaría sus vidas.
Fue amor a primera vista. Desde ese momento, supieron que compartirían el resto de sus vidas persiguiendo su pasión por los implantes y las modificaciones corporales, algunas de las cuales, admiten, son muy dolorosas.
La pareja lleva 14 años felizmente casada. El amor y la dedicación que se tienen el uno al otro hace que cada uno de ellos se sienta fortalecido y orgulloso de lo que realmente es.
La primera modificación corporal de Víctor, las estrellas en la frente, fue en 2009. Como le encantaba su nuevo aspecto, Gabriela no tardó en seguirle con sus propias modificaciones.
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