Agotamiento social: cómo poner límites a las reuniones durante las fiestas
La meta es encontrar un equilibrio entre el movimiento propio de las celebraciones navideñas y el respeto a nuestras necesidades.
Aunque la temporada navideña es un momento para celebrar con la familia e incluso amigos, hay reuniones que suelen no ser del todo cómodas para algunos.
Factores como la entrega de regalos, itinerarios de viajes y la decisión de a qué miembros de la familia ver, pueden ser detonantes de estrés.
Conviene, por lo tanto, tener en cuenta una serie de recomendaciones útiles que nos pueden ayudar a sobrellevar la Navidad cuidando, además, nuestra salud mental.
Si te identificas con esta descripción, también debes tener en cuenta que debes tratar de comprender las propias necesidades en estas fechas y sostenerlas desde la perspectiva del respeto y la asertividad.
Debes buscar tu espacio de intimidad y equilibrarlo con momentos de compartir junto a las personas queridas, pues aislarte tampoco es positivo.
La meta es encontrar un equilibrio entre el movimiento y el respeto a nuestras necesidades.
Afortunadamente, con la llegada de la pandemia, cada vez somos más los que valoramos la salud mental y estamos conscientes de hacer lo necesario para cuidarla.
Qué es el agotamiento social
Los expertos dicen que las vacaciones pueden desencadenar severamente el “agotamiento social”.
Según el sitio Psychology Today, al igual que el agotamiento regular, el social consiste en sentirse estresado, ansioso, abrumado, irritable y desconectado. Describe la sensación de que no importa cuánto hagamos socialmente, no podemos mantener el ritmo y terminamos sintiéndonos agotados.
“He visto clientes que dicen que disfrutaron la parte de aislamiento de COVID”, dijo Tiffany Harris de Transcend Counseling Services.
Los expertos dicen que la mejor manera de proteger su salud mental es establecer límites, reconocer cuando algo o alguien puede excederlos y sobre todo perder el miedo a deecir “no” será de mucho beneficio.
La clave de poner límites
En primer lugar, debes estar consiente de tus emociones. Pregúntate qué sientes: felicidad, incomodidad, tristeza o molestia. Identificándolas podrás también reconocer cuando una persona o una situación excedan tus límites.
No tienes razones para ser complaciente. Cuando algo te incomoda trata de comunicarlo de la forma más respetuosa posible. Lo más seguro es que cuando empieces a establecer límites tengas relaciones más auténticas.
Si surgen sentimientos de depresión o tristeza, está bien buscar ayuda. La Línea Nacional de Prevención del Suicidio está disponible las 24 horas del día en el 1-800-273-8255.
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