La Opinión Hoy: Messi, entre el amor y el odio tras el Mundial
En esta emisión, los aficionados al fútbol llevan sus sentimientos por el astro argentino al límite, según su ubicación geográfica; además, el famoso chef turco violó algunos estatutos del máximo organismo del balompié internacional y será investigado por ello.
La Copa del Mundo Qatar 2022 deslumbró como nunca a Lionel Messi, quien es probablemente el ser humano más reconocido al día de hoy.
Para nadie es un secreto que el capitán de la albiceleste levanta pasiones en todas parte del mundo y mucho más en su ciudad natal, Rosario, donde el furor por él simplemente no tiene ningún límite.
Ante esta realidad, los salones de tatuajes han colapsado para atender las solicitudes recibidas de quienes buscan inmortalizar el rostro del “10” en su piel. Según un reportaje de EFE, las solicitudes de este tipo de tatuaje han aumento drásticamente tras la victoria del equipo argentino en la Copa del Mundo.
Inclusive hay casos de personas que seis meses antes de la victoria de la albiceleste ya habían pedido tatuarse a Messi levantado la copa. Otras de las imágenes solicitadas son la del portero “Dibu” Martínez y la del también rosarino, Ángel Di María.
Francia tras la derrota
Mientras Argentina sigue saboreando su triunfo en la Copa del Mundo, en Francia algunos aficionados al fútbol no han tomado la derrota con buena cara, muestra de ello es la imagen de un bar, que se ha vuelto viral en las redes sociales, en donde se ve un jersey de Lionel Messi como tapete en la entrada.
“No olvides limpiarte los pies antes de entrar”, se lee en un cartel junto al peculiar tapete, el cual es la camiseta de “La Pulga” con el dorsal 30 en el equipo parisino, PSG.
Todo esto se traduce como una venganza de los franceses, quienes aún se encuentran dolidos y molestos porque Messi les quitó el triunfo en Qatar, debido a que marcó dos de los tres goles antes de ir a los penales.
Aunque no se conoce más detalles sobre esta imagen, diversos internautas han especulado que dicho bar se encuentra en París, en donde la afición está tan molesta que no quieren que Messi vuelva al equipo.
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