Familia de Seattle conduce 2,600 millas hasta San Diego para adoptar a un perro con un problema físico
Harvey es un husky de año y medio que nació con la peculiaridad de tener su boca torcida, lo cual le implicó ser rechazado por varias personas hasta terminar en un albergue
Sherry Lankston y su familia se lanzaron en busca de una mascota descrita como juguetona Crédito: Jeff J Mitchell | Getty Images
Después de ver una publicación del Departamento de Servicios para Animales del Condado de San Diego sobre un perro husky en adopción, cuyo rostro tiene una sonrisa torcida, Sherry Lankston y sus dos hijos decidieron convertirlo en el nuevo miembro de la familia.
Sin embargo, para tener en casa a la mascota debían desplazarse hasta California, travesía que les implicaría recorrer 2,600 millas, pero también representaba la posibilidad de visitar a algunos viejos amigos, pues años atrás Sherry había vivido en el sur del país.
De acuerdo con el departamento de servicios para animales del sur de California, Harvey es un perro husky de un año y medio al que se describe como una mascota tranquila y amigable que desconoce tener su boca torcida.
Durante una entrevista concedida a la cadena de televisión CBS, Sherry Lankston reconoció que el defecto físico de Harvey fue lo que le despertó su deseo de adoptarlo.
“Vi esa sonrisa tonta y supe que debíamos conocerlo. Han pasado algunos años desde que pudimos visitar a nuestros amigos y lugares favoritos en San Diego, ¿por qué no? No estaba buscando activamente un nuevo bebé peludo, pero la cara dulce de este animal me tiene desmayada”, indicó.
Aprovechando que sus hijos no estaban yendo a la escuela, la mujer empacó todo lo necesario y lo metió a su vehículo para, acompañada de su familia, salir en busca de la mascota.
Luego de varios días de rodar por el asfalto, la familia Lankston logró reunirse con el peludo Harvey a quien sin dudarlo lo subieron en su vehículo para regresar a su hogar.
Como la historia cobró relevancia en redes sociales, varios usuarios elogiaron el gesto de adoptar a una mascota distinta a las demás, pero sobre todo por recorrer una enorme distancia con el objetivo de darle oportunidad de tener un hogar.
Al respecto, Joy Ollinger, la oficial humanitaria que publicó el mensaje de adopción del perro husky, desea que esta historia inspire a otras personas a adoptar a más animales disponibles en albergues.
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