La comunidad angelina está triste e indignada por el asesinato del estudiante en El Sereno; el sospechoso ya fue detenido

Gran consternación ha causado el acuchillamiento por la espalda y asesinato del adolescente Xavier Daniel Chavarín, estudiante ejemplar de 17 años que esperaba graduarse  en junio de la preparatoria Woodrow Wilson.

El 3 de marzo, el joven acababa de salir de la escuela y esperaba a su madre que lo recogiera  como de costumbre, cuando de repente fue atacado por la espalda por un individuo que portaba un puñal grande con el que acabó con su vida.

El sospechoso, quien ese mismo día acuchilló a otra persona horas más tarde, fue finalmente detenido el martes 7 de marzo  e identificado como David Anthony Zapata, de 33 años.

Las autoridades dijeron que aparentemente Zapata sufre de problemas mentales y su arresto se dio luego de haberse atrincherado por varias horas en su casa en la ciudad de Alhambra. 

Apoyados por un helicóptero, miembros del equipo de tácticas especiales del Departamento de Policía de Los Ángeles y policías fuertemente armados cercaron la vivienda. 

Después de varias horas de negociaciones, Zapata salió tranquilamente y se entregó a eso de las 9:00 de la mañana del miércoles. 

“El sospechoso fue puesto bajo custodia sin ningún incidente”, dijo el capitán Germán Hurtado, del LAPD. 

“Nuestro equipo de negociación en casos de crisis y nuestra unidad de evaluación mental hizo un trabajo sobresaliente al negociar con él y asegurare de que llegaríamos a una resolución pacífica”, añadió Hurtado. “Usaron todas las tácticas de desescalada,  fueron muy profesionales y [David Zepeda] salió y se entregó”. 

Las primeras investigaciones del caso indicaban que Zapata tiene un aparente historial de problemas de salud mental; mientras tanto, se espera que enfrente un cargo de homicidio. 

Por la espalda

Chavarín murió a eso de las 3:55 de la tarde en la cuadra 4500 del bulevar Valley, cuando esperaba a su madre frente al restaurante Torta King,  en El Sereno 

Perturbadoras imágenes captadas por la cámara del negocio muestran al supuesto asesino, cuando estaciona su automóvil en el negocio, sale del mismo, y camina con un cuchillo grande en su mano. 

Zapata acuchilló al joven por la espalda varias veces, y él, ensangrentado y herido, alcanzó a dar unos pasos para pedir auxilio en el restaurante donde colapsó. 

 Patrulleros de la División Hollenbeck del Departamento de Policía de Los Ángeles respondieron a una llamada sobre el asalto con el arma punzocortante. 

También, paramédicos del Departamento de Bomberos de Los Ángeles acudieron a la escena e intentaron salvar la vida del joven, pero desafortunadamente sucumbió a sus heridas y falleció en el lugar. 

“Esto es demasiado triste”, dijo a La Opinión, Lupita Torres, una residente de El Sereno, de 81 años, después de haberse hincado y rezado por el descanso eterno del joven asesinado. 

“Ya agarraron al loco”, dijo. “No entiendo porque si vivía en Alhambra vino a hacer su maldad en El Sereno”. 

Un segundo ataque 

 Detectives encargados del crimen consideraron que el tipo que se rindió fue el mismo que agredió, ese mismo día y con la misma arma, a otra víctima de 33 años, a quien también apuñaló varias veces. 

En el segundo ataque, el sospechoso parecía usar la misma ropa, pero ya no llevaba la gorra de beisbol y estaba montando una patineta. 

Esta agresión se dio cinco horas después -sobre el mismo bulevar Valley- donde había matado a Xavier Chavarín. 

“Esta violencia en las calles parece como si estuviéramos en los tiempos de los cowboys”, dijo Tony Guevara, un trabajador de carrocería y pintura, quien almorzaba en el restaurante King Torta, donde en la acera ocurrió el asesinato. “Uno ya no puede salir tranquilo a ningún lado”. 

Jessica y Erik, familiares de la víctima, abrieron una cuenta de GoFundMe para recabar fondos para ayudar a la familia con gastos del funeral.  

En la misma página, amigos y del adolescente asesinado le dejaron mensajes de condolencia. 

“Conozco a Xavier desde hace más de 3 años. Era una buena persona, divertido y de buen corazón con todas las personas con que entraba en contacto”, escribió Alan Chau.

 “Disfrutó el arte y pasó tiempo de calidad perfeccionando su trabajo”, agregó. “Extrañaré sus bromas y buen humor en el salón de clases. Mi más sentido pésame a la familia”. 

Y en el altar improvisado que se erigió frente al restaurante donde el chico fue abatido siguen llegando personas a  encender veladoras o depositar ramos de flores como Marisela Villar, Carlos Arce y Troy Carvajal, miembros representantes distritales de la asambleísta estatal Wendy Carrillo (Distrito 52)  

“[Xavier Chavarán] era uno de nuestros constituyentes y su muerte es una tragedia para la comunidad”, dijo Villar a La Opinión. “Nuestros corazones están destrozados, sobre todo por la madre del joven y toda su familia”.