La fiscal general de Nueva York anunció la caída de una importante red de narcotráfico: “Una asombrosa cantidad de drogas”
La fiscal general de Nueva york anunció el martes el desmantelamiento de una gran red de narcotráfico y tráfico de armas en ese estado, con 48 implicados, entre ellos, un latino que organizaba el tráfico de fentanilo desde California a NY
La fiscal general de NY, Letitia James, anunció la caída de una gran red de casi 50 narcotraficantes. Crédito: David Dee Delgado | Getty Images
La fiscal general de Nueva York, Letitia James, dijo el martes que las calles son más seguras después del desmantelamiento de una importante red de narcotráfico que inundó a las comunidades con fentanilo, cocaína, heroína y otras drogas peligrosas en ese estado.
James visitó Rochester el martes para anunciar 48 arrestos y el decomiso de 10 kilos de fentanilo y 10 kilos cocaína valorados en $9 millones de dólares ,como parte de una investigación de dos años sobre narcotráfico que tuvo lugar principalmente en los condados de Monroe y Wayne, pero también se extendió a los condados de Ontario, Orleans, Yates, Seneca y Cayuga, un área conocida como los Finger Lakes, al norte del estado de Nueva York.
James dijo en un comunicado que la gran red de narcotráfico involucraba a tres grupos interconectados, responsables de vender drogas en esos siete condados y que los investigadores también incautaron 19 armas de fuego, incluidas armas de asalto y pistolas fantasma, y más de $440,000 dólares en efectivo.
Las autoridades que empezaron a investigar hace dos años el origen de la cocaína que se vendía en la región comenzaron en el condado de Wayne, donde los investigadores determinaron que Michael Danzey y su hermano Terrance Raggs eran las principales fuentes de cocaína en ese condado.
“Las raíces de esta investigación comenzaron con la búsqueda de la fuente de narcóticos ilícitos en el condado de Wayne”, dijo el Sheriff Robert Milby. “Eso nos llevó rápidamente a la totalidad de la región de Finger Lakes”.
A partir de ahí, las autoridades rastrearon la red de tráfico de drogas hasta una segunda operación, que involucró a revendedores que vivían en una pequeña sección de Avenue D en Rochester.
La fiscal James dijo que muchos de los vendedores de drogas de Avenue D tenían una sola fuente de suministro de cocaína en Rochester: Luis Rivera y sus tres hijos. A Luis Rivera lo acusan de dirigir una red de narcotráfico desde un edificio residencial en Rochester donde trabajaba como conserje.
Rivera organizaba grandes envíos de fentanilo desde California hasta Rochester junto a su hijo Jacob, que estaba en una prisión federal en Louisiana pero se valía de teléfonos de contrabando para supervisar las operaciones, indica el comunicado.
Luis y Jacob Rivera están acusados de “operar como un gran narcotraficante”, un delito penado con un mínimo de 25 años y un máximo de cadena perpetua, y también de lavado de dinero, ya que tenían una empresa pantalla con la que invertían en propiedades. También están acusados otros dos hijos de Rivera.
Los Rivera presuntamente vendían fentanilo en formato de pastilla y decían que era oxicodona, un opioide potente para tratar el dolor, lo que “ponía a sus compradores en un riesgo todavía más grande”.
Los 48 detenidos, hombres y mujeres residentes en el norte de Nueva York cuyas edades van de los 24 años hasta los 77, acumulan un total de 177 cargos, muchos de ellos relacionados con la venta y posesión de “sustancias controladas”.
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