Jaime Lozano, el entrenador que rompe el molde y está comprometido con visibilizar el autismo
El Jimmy ha compaginado su pasión por el fútbol y trabajo de entrenador hacer del autismo un trastorno menos estigmatizado gracias al diagnóstico de su hijo Luca, por el que incluso casi gana una nominación al Oscar con un cortometraje
Jaime Lozano. Crédito: Etzel Espinosa | Imago7
Nació en una familia de actores y tras un largo camino dentro del fútbol, Jaime Lozano ahora lleva las tiendas de las selección mexicana; no obstante, el joven entrenador ha sido protagonista de una ardua lucha a favor de la visibilización del autismo gracias a Luca, el mayor de sus tres hijos.
Cuando se casó con Catalina Cerna, su vida cambió por completo, pero no sé dieron cuenta hasta que llegó su hermana Eugenia. Sirvió como un punto de comparación porque empezaron a notar comportamientos distintos y distracciones que duraban más de lo normal.
La familia lo afrontó como un reto familiar y aunque todos los diagnósticos en México coincidieron, se fueron en busca de respuestas a España. Ya de regreso y con un panorama más claro de lo que contempla vivir bajo este trastorno, se enfrentaron a la cruda realidad del rechazo.
Al menos 21 escuelas privadas rechazaron a Luca ante la desinformación sobre el tema. Esto lo motivó a ser un DT que se salía totalmente del molde. Lozano decidió, junto a su esposa, iniciar una campaña para crear conciencia sobre el autismo. Diversas figuras del balompié contribuyeron con mensajes, pero también se produjo un cortometraje que se quedó en puertas de una nominación a los Óscar del 2020.
Jimmy marchó a Europa para formarse en la dirección técnica. A su regreso dirigió en categorías juveniles, fue auxiliar de Víctor Manuel Vucetich en Querétaro y después asumió el rol de DT principal. Fue campeón de la Supercopa de 2017.
Llega al Tri gracias a Gerardo Torrado, quien lo llamó para dirigir a la selección Sub-23 en el proceso olímpico de Tokio 2020. Ahí consiguió medalla de bronce en los Panamericanos de Lima 2019, el Preolímpico de Guadalajara y el bronce en Tokio 2020.
Lo que no pudo cumplir de jugador, ya lo vivió como entrenador, aunque le queda la experiencia europea y un Mundial. Aunque fue nombrado como DT interino, Lozano está ante la oportunidad de su vida y convencer a la FMF de que lo ratifique de cara al Mundial de 2026.
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