Cómo saber si las llantas de tu vehículo necesitan ser rotadas

Cada cierto tiempo es necesario rotar los cuatro neumáticos del coche. Conoce exactamente cuándo deberías hacerlo y por qué

Llantas de coche

Llantas de coche Crédito: Shutterstock

Quizás hayas escuchado acerca de la rotación de los neumáticos, sin embargo, puede que no hayas prestado la debida atención que requiere este aspecto, o todo lo contrario, sabes perfectamente cómo y cuándo llevarlo a cabo.

Ciertos conductores podrían pensar que no es importante, pues los neumáticos siempre están en contacto con el suelo, además de girar hacia derecha o izquierda de forma equivalente, entonces, ¿sirve de algo realmente?

La respuesta es sí. Sin embargo, para aquellas personas que no conocen del todo la importancia de esta acción de mantenimiento, a continuación te explicamos por qué resulta oportuno hacerlo y cuándo hacerlo.

Ventajas de rotar las llantas

Primero que todo generará un impacto positivo en tu bolsillo, dado que rotar los neumáticos con mayor frecuencia ayudará a gastar menos dinero en costo de mantenimiento tras sacar el máximo provecho al juego de 4 llantas equipado en el coche.

Si los neumáticos no se giran con frecuencia (conduciendo) hará que se gasten de forma irregular. De hecho, el par de adelante se desgasta más rápido que los traseros dado que son responsables de controlar la dirección del vehículo, haciendo que el neumático ubicado hacia el extremo opuesto de la curva gire más.

Ahora, ante problemas de alineación errónea, no rotar las llantas contribuirá a que este inconveniente se agrave con mayor frecuencia debido a rodar de forma uniforme, generando desgaste sin uniformidad.

Frecuencia para rotación de neumáticos

Como varios procedimientos de mantenimiento, no existe un periodo de tiempo exacto para conocer a ciencia cierta cuándo rotar los neumáticos del coche. Sin embargo, lo más recomendable es hacerlo a cada 5,000 millas de recorrido aproximadamente.

Ahora, tendrás que tomar en consideración de tu forma de conducir y la regularidad con que lo haces. De igual manera, el tipo de superficie también será clave para ello. Por ejemplo, si tiendes a frenar con fuerza, dejando pocos metros entre el punto de impacto y tu auto ocasionará mayor desgaste.

Finalmente, a ello hay que sumarle el tipo de tráfico (ciudad o rural) donde se añade a la ecuación la cantidad de aceleraciones y frenadas, curvas a tomar e intensidad del tráfico. Si tienes dudas al respecto, consulta con un experto en una vulcanizadora o taller especializado en neumáticos cercano a ti.

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