Israel declara estado de guerra tras el destructivo ataque de Hamás
Hamás afirmó haber lanzado un ataque de hasta 5.000 cohetes en el lapso de tan solo 20 minutos. Como represalia inmediata, Israel inició una serie de ataques dirigidos hacia objetivos en la Franja de Gaza.
Palestinos y militantes de las Brigadas Ezzedine al-Qassam corren hacia el cruce de Erez entre Israel y el norte de la Franja de Gaza Crédito: Majdi Fathi | AFP / Getty Images
La región de Medio Oriente se encuentra al borde de una peligrosa escalada de violencia mientras Israel y Palestina se enfrentan a una crisis que amenaza con desencadenar un conflicto aún más devastador. El reciente ataque por parte de Hamás, el grupo militante palestino en la Franja de Gaza, y la respuesta inmediata de Israel han generado preocupación a nivel internacional.
Hamás lanza la operación “Asalto de Al-Aqsa”
La escalada de violencia comenzó cuando Hamás anunció la operación “Asalto de Al-Aqsa” y afirmó haber disparado más de 5.000 cohetes en las primeras horas del ataque. Esta declaración fue acompañada por llamados a ampliar los frentes contra Israel, incluyendo posibles intervenciones de grupos desde el Líbano y Siria, con el apoyo de Irán.
Hasta el momento, cuando menos 100 personas han resultado heridas en Israel como consecuencia de los atentados perpetrados el sábado desde Gaza, según datos de dos hospitales y una mujer de unos 70 años de la región israelí de Gderot murió tras el bombardeo, según informó el servicio de rescate israelí Magen David Adom (MDA).
Respuesta inmediata de Israel
Israel respondió a este ataque con determinación. El primer ministro Benjamin Netanyahu convocó una reunión de urgencia en Tel Aviv y anunció ataques aéreos contra objetivos de Hamás en Gaza. Las autoridades israelíes también ordenaron una amplia movilización de reservistas y el despliegue de efectivos en Sderot y localidades agrícolas para evitar secuestros y enfrentamientos en las calles. Un portavoz israelí ha informado que hay combates a tiros entre soldados israelíes y milicianos palestinos en distintos puntos del territorio.
Violencia en las calles y toma de edificios
La infiltración de decenas de milicianos en las calles de Sderot y otras localidades israelíes ha generado enfrentamientos armados, con informes de habitantes que llaman a las cadenas de televisión para pedir ayuda en voz baja debido a la presencia de encapuchados cerca de sus hogares. La unidad de lucha antiterrorista de la Policía israelí se ha movilizado ante la toma de varios edificios en el sur de Israel por parte de los palestinos armados procedentes de Gaza.
Llamado a la contención internacional
La comunidad internacional ha observado con creciente preocupación esta escalada de violencia. Rusia, entre otros, ha instado a ambas partes a mostrar contención y buscar una solución pacífica. Sin embargo, la situación en el terreno se vuelve cada vez más volátil, y el riesgo de una guerra a gran escala se torna inminente.
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