Día Mundial de la Menopausia 2023: cómo mitigar los efectos en el cerebro
Investigaciones recientes han revelado que el estrógeno tiene un impacto significativo en el cerebro. este órgano experimenta una remodelación, con cambios en el tamaño y la configuración de diversas regiones cerebrales.
La menopausia se considera como la tercera de las tres "P", junto con la pubertad y el embarazo, que representan importantes fases de cambio en el cerebro femenino. Crédito: Rustle | Shutterstock
La menopausia, un evento que marca el final de la capacidad reproductiva en las mujeres, es una etapa que aproximadamente la mitad de la población mundial experimentará si vive el tiempo suficiente. Sin embargo, esta fase, al igual que muchas otras relacionadas con la salud de la mujer, sigue siendo insuficientemente comprendida.
La menopausia está asociada con una disminución de hormonas, principalmente el estrógeno, lo que conduce a la reducción y eventual cese de la fertilidad. Además de los cambios en la función reproductiva, las mujeres pueden experimentar una amplia variedad de síntomas durante la perimenopausia, que son los años previos a la menopausia.
Estos síntomas no se limitan a los órganos reproductivos e incluyen sofocos, confusión mental, cambios de humor, agotamiento y alteraciones del sueño.
Investigaciones recientes han revelado que el estrógeno tiene un impacto significativo en el cerebro, un descubrimiento que se hizo relativamente tarde en la historia médica, en 1996, mucho después de que los hombres llegaran a la luna.
La profesora Lisa Mosconi y su equipo realizaron escáneres cerebrales en más de 160 mujeres de entre 40 y 65 años en diferentes etapas de la menopausia. Los resultados fueron sorprendentes: el cerebro de las mujeres experimenta una remodelación, con cambios en el tamaño y la configuración de diversas regiones cerebrales.
La menopausia se considera como la tercera de las tres “P”, junto con la pubertad y el embarazo, que representan importantes fases de cambio en el cerebro femenino. Aunque estas fases son culturalmente diferentes y se ven de manera dispar en la sociedad, desde una perspectiva neurológica, tienen similitudes notables, ya que todas implican cambios significativos en el cerebro, además de cambios en el cuerpo.
Para afrontar esta transición, se proponen cinco consejos clave:
Los cambios cerebrales que ocurren durante la menopausia están vinculados al desmantelamiento de un complejo sistema neurológico que conecta el cerebro con los ovarios, un sistema crucial para la reproducción. La menopausia no solo conlleva vulnerabilidades y desagradables síntomas, sino también resiliencia, un aspecto que a menudo se pasa por alto en medicina, ciencia y cultura.
- Evitar el tabaco: El tabaquismo puede empeorar los síntomas de la menopausia y acelerar el envejecimiento celular. Incluso la exposición al humo de segunda mano puede ser perjudicial.
- Hacer ejercicio: La actividad física, especialmente el ejercicio aeróbico como la caminata rápida, es beneficioso para la salud hormonal y cerebral, ayudando a reducir la intensidad de los síntomas y mejorar la función cognitiva.
- Seguir una dieta basada en plantas: Una alimentación rica en productos agrícolas, frutas, verduras y alimentos con antioxidantes es fundamental para la salud cerebral, ya que los antioxidantes contrarrestan el envejecimiento cerebral.
- Priorizar la higiene del sueño: El descanso reparador es esencial para la salud cerebral y el bienestar general. Dormir lo suficiente es crucial para la función inmunológica, el control del peso y la memoria.
- Considerar la terapia de reemplazo hormonal (TRH): La TRH puede ser segura y beneficiosa para aliviar los síntomas de la menopausia en mujeres adecuadas. Consultar con un profesional de la salud es importante para determinar si la TRH es una opción viable.
Desafíos laborales
Además de los desafíos físicos y emocionales de la menopausia, un informe revela que esta etapa conlleva un costo significativo para la economía, especialmente en Canadá. Los síntomas no controlados de la menopausia resultan en pérdida de productividad para los empleadores, y las mujeres enfrentan ingresos perdidos debido a la reducción de horas, salarios más bajos o la salida del mercado laboral.
La perimenopausia, que puede durar de dos a 20 años, y la posmenopausia, que puede durar el resto de la vida de una mujer, significan que las mujeres pueden pasar hasta la mitad de sus vidas en la etapa de la menopausia. A pesar de su universalidad, muchas mujeres no se sienten preparadas para esta transición debido a una falta de comprensión sobre los cambios en sus cuerpos y los síntomas relacionados con la menopausia.
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