Arde Bogotá, una banda sin miedo y sin complejos
Los miembros de la agrupación cuentan su trayectoria hasta ser nominados a los Latin Grammy
Arde Bogotá es una banda española que en los pocos años que tiene de fundada ha causado un revuelo impresionante. Puede que sea porque su rock tiene aires de agrupaciones rockeras clásicas de los ochentas. O porque sus integrantes no tenían grandes pretensiones cuando se conocieron y empezaron a tocar juntos en su natal Cartagena, España.
Sí, aunque suene confuso, se trata de una agrupación que nació en una ciudad española que tiene el mismo nombre que una ciudad colombiana. Pero el nombre de Arde Bogotá sí lo inspiró la capital colombiana. Fue en ese lugar donde los amigos del cantante, Antonio García, escucharon por primera vez una maqueta de la banda, el tema “Antiaéreo”.
En 2017, en un bar de Cartagena, alguien presentó a Antonio y a Daniel Sánchez, quien ya tenía un grupo de rock junto con José Ángel Mercader (batería) y Pepe Esteban (bajo), pero necesitaba un cantante. Antonio fue la adición perfecta.
“Sin mucha pretensión nos juntamos y pasamos mucho tiempo haciendo canciones, tratando de descubrir qué música queríamos hacer, a qué queríamos que sonara nuestro rock”, contó Antonio en una conversación reciente.
Pasaron dos años, “hasta que por fin tuvimos entre las manos una canción de la que estábamos suficientemente orgullosos para publicar”, dijo el cantante. Era casualmente la primera canción que el grupo había compuesto, “Antiaéreo”.
Este corte fue la punta de lanza para el cuarteto. A partir de esa canción, Antonio y Daniel describen la trayectoria de Arde Bogotá como frenética; eso a pesar de la interrupción de la pandemia.
“Cada día, cada mes, nos han pasado cosas que han vitalizado el proyecto”, dijo Daniel, guitarrista del grupo. “Y ha hecho que lo que hacemos llegue a más gente”.
Actualmente, el grupo está promocionado “Cowboys de la A3”, un álbum —el segundo de su carrera—, que ha servido no solo como un elemento más para la consolidación de la banda en el mundo del rock, sino para que su música y su nombre salgan de las fronteras de su país y se conozca en este lado del planeta.
Por lo pronto, están todavía incrédulos por las dos nominaciones que recibieron al Latin Grammy, una en la categoría de Mejor álbum de rock, por “Cowboys”, y en Mejor canción de rock, por “Los perros”.
El disco más reciente de la banda narra las experiencias, reflexiones y vicisitudes que la banda vivió mientras hacía su primera gira. Fue el momento que cambió sus vidas.
“Fue cuando dejamos de ser todas las cosas que éramos antes de ser músicos y empezamos a ser solamente músicos”, dijo Antonio, quien al igual que Daniel, era abogado. Pepe trabajaba en una hostería y José era maestro de inglés en una universidad.
“Todas esas vivencias estaban ligadas a las carreteras, a los caminos”, explicó Daniel. “Descubrimos que éramos una banda de rock sin complejos, sin miedos, con energía y con honestidad, con ganas de hacer una música rockera y apasionada”.