Ordenan medidas de seguridad adicionales en Los Padrinos para evitar fugas

“Los centros juveniles de detención tienen la reputación de abuso, brutalidad y negligencia hacia los menores” de la ley, dicen defensores de los derechos civiles

Entrada a las oficinas del Centro de Detención Juvenil Los Padrinos por la calle Quill Drive, en la ciudad de Downey.

Entrada a las oficinas del Centro de Detención Juvenil Los Padrinos por la calle Quill Drive, en la ciudad de Downey. Crédito: Impremedia

Peleas, guardias heridos e intentos de escape son una plaga en el Centro Juvenil de Detención Los Padrinos, ubicado en la ciudad de Downey, donde el sábado pasado un recluso intentó escapar, y posteriormente fue detenido.

De inmediato, la presidenta de la Junta de Supervisoras del condado de Los Ángeles, Janice Hahn, ordenó que se implementen medidas de seguridad adicionales .

En la noche del 4 de noviembre, después de agredir a un miembro del personal, un joven encarcelado logró apoderarse de las llaves y saltó una cerca. Unos 10 minutos después fue detenido por la policía y elementos del Departamento de Libertad Condicional.

La breve fuga fue la segunda que se registra en el Centro Juvenil Los Padrinos. La primera ocurrió apenas dos semanas después de que se reabrieran las instalaciones, en julio pasado.

“Es inadmisible que en los últimos cuatro meses dos jóvenes hayan logrado escapar del Centro Juvenil Los Padrinos”, dijo la supervisora Janice Hahn, quien representa a las ciudades de Downey y South Gate. “Afortunadamente, ambos fueron detenidos casi inmediatamente después de su fuga, pero no podemos permitir que vuelva a suceder”.

El lunes, la Hahn presentó una propuesta de urgencia con respecto a la fuga del fin de semana.

La propuesta, que fue aprobada por voto unánime, ordena al director interino de Libertad Condicional del Condado de Los Ángeles, Guillermo Viera Rosa, que presente un plan de acción correctiva durante la reunión pública de la Junta de Supervisoras, el próximo 21 de noviembre, el cual deberá incluir descripciones de medidas y políticas de seguridad adicionales que implementará el Departamento de Libertad Condicional para evitar cualquier escape futuro en las instalaciones.

La propuesta de Hahn también ordena Viera Rosa que se reúna con funcionarios de las ciudades de Downey y South Gate para discutir medidas de seguridad adicionales que se están implementando en el Centro Juvenil Los Padrinos, a fin de garantizar la seguridad de las comunidades circundantes.

Por último, la propuesta de Hahn ordena a la Oficina del Inspector General Max Huntsmen, que investigue la fuga del 4 de noviembre y proporcione un informe escrito a la Junta de Supervisoras en 120 días.

También indica que el informe debe incluir una descripción general y un análisis de los hechos que llevaron a la fuga y recaptura del menor, y recomendaciones sobre medidas y políticas de seguridad adicionales para prevenir futuros incidentes.

La mayoría de los presos son hispanos y afroamericanos

Las probables causas de la frustrada fuga del joven encarcelado tienen sus raíces “en el abuso, brutalidad y negligencia hacia los menores”, afirmó Earl Ofari Hutchinson, presidente de la Mesa Nacional Redonda Urbana y líder afroamericano de derechos civiles.

Hutchinson declaró a La Opinión que, durante mucho tiempo, “se las ha tildado de caldo de cultivo para la violencia criminal y la reincidencia”.

“Hay un énfasis mínimo o nulo en la educación, capacitación, asesoramiento, programas recreativos y de apoyo a los jóvenes [en los centros de detención juvenil]”, añadió.

Por ello, dijo que no le sorprendió que algunos jóvenes encarcelados intenten escapar “de las condiciones abusivas”.

Aseguró que tampoco es casualidad que la mayoría de los jóvenes encarcelados sean afroamericanos e hispanos.

Un portavoz del Departamento de Libertad Condicional dijo a La Opinión que en las instalaciones de Los Padrinos se encuentran recluidos 308 jóvenes, de los cuales 22 son mujeres. Entre los hombres, hay 106 afroamericanos y 186 hispanos; 4 pertenecen a otras razas y 12 blancos.

“Son los más pobres, los menos educados y provienen de hogares desintegrados y sin recursos para obtener servicios legales de calidad”, asentó Hutchinson. “Las reformas deben centrarse en la rehabilitación, no en el castigo. Eso significa un cambio masivo de programación y financiamiento por parte de los funcionarios del condado”.

Tensión racial e inseguridad

Funcionarios de libertad condicional habían dicho en agosto que estaban estudiando la posibilidad de instalar redes alrededor de las instalaciones. El proyecto no iniciaría sino hasta 2024.

Las instalaciones de Los Padrinos fueron reabiertas a mediados de julio para albergar a aproximadamente 300 menores de edad, quienes fueron transferidos por el cierre de los centros juveniles de detención, Barry J. Nidorf y de la Cárcel Central, por las malas condiciones en que operaban.

Aún no había pasado una semana, cuando autoridades del Departamento de Libertad Condicional cerró Los Padrinos, debido a que fue encontrada un arma en una oficina, lo cual está prohibido y es ilegal. Los únicos que están armados, son los guardias de seguridad privados que controlan a la entrada de peatones, automovilistas y personal de las instalaciones de Quill Drive, en Downey.

Menos de dos semanas después, el 28 de julio, en lo que fue calificado como una “perturbación importante” de “tensión racial e indicios de que algo grande está por suceder”, siete jóvenes agredieron a miembros del personal de Los Padrinos, rompieron una puerta a un lado de la sala de estar; después rompieron una ventana de una segunda unidad y a la turba se les unieron otros seis jóvenes encarcelados.

El joven mayor, de 18 años logró escalar una pared y saltó al campo de golf adyacente al Centro Juvenil de Detención. Más tarde fue detenido, gracias a la ayuda de los departamentos de policía de ciudades vecinas.

El resultado de la trifulca fue, un oficial con fractura en el brazo y la cadera, y otros dos heridos.

Entre los rijosos, Xavier Pérez, de 18 años y Frankie Dale, de 19, fueron acusados de cuatro cargos de agresión. A Pérez podría juzgársele como adulto y podría recibir cargos adicionales de posesión de armas en el interior de un centro de demores e intento de escape.

“Yo fui pandillero y cuando fui encarcelado, las condiciones en los centros [de detención juvenil] eran muy malas”, comentó el abogado Humberto Guízar, un experto en el comportamiento de los jóvenes afiliados a grupos callejeros criminales. “Era muy peligroso estar encerrado; había muchas peleas, pero de Los Padrinos no puedo decir nada, porque desconozco lo que está pasando allí”.

El pleito de finales de julio provocó de nuevo el cierre de Los Padrinos.

Posteriormente, inspectores de la Junta Correccional Estatal y Comunitaria de California descubrieron que la instalación no cumplía en 10 categorías diferentes de seguridad.

Como resultado, la junta reguladora también amenazó con cerrar Los Padrinos, pero el estado aceptó el plan del condado de Los Ángeles para arreglar las instalaciones y le dio al Departamento de Libertad Condicional hasta enero para implementar cambios. Si el condado no puede cumplir con la fecha límite, Los Padrinos podría ser declarado “no apto”, una designación que también obligaría a su cierre.

Fallas por corregir en Los Padrinos

El reporte 2023/2024, la Junta de Correcciones Estatales y Comunitarios (BSCC) reveló que en Los Padrinos Juvenile Hall que, contrario a lo que dijeron quienes administran dicho correccional, los jóvenes reclusos afirmaron que el sitio de confinamiento sí lo tienen funcionando.

“Se nos informó que el confinamiento en la celda no ocurre, pero durante el proceso de inspección, incluidas las conversaciones con los jóvenes y el personal, nos dimos cuenta de que el confinamiento en la celda efectivamente está ocurriendo”, escribieron los inspectores de la BSCC, aunque aclararon que no tenían documentación para determinar si se estaba cumpliendo esa corrección.

La política del uso de fuerza fue implementada, aunque “el personal no había sido capacitado para el uso de la fuerza, incluido el OC”, señala el reporte.
El OC es un aerosol de oleorresina de pimiento, -similar al gas pimienta- que aplica un nivel intermedio de fuerza y se emplea para incapacitar y someter a individuos amenazadores o violentos.

“Somos conscientes de que se ha desarrollado la capacitación y se está planificando la programación”, señalaron los inspectores estatales.

En materia de disciplina, en Los Padrinos se carece de un proceso adecuado para aplicarla, y, de acuerdo con el informe, “a instalación debe desarrollar un programa base inventivo, adecuado y apropiado para la edad [de los reos jóvenes] para fomentar un comportamiento positivo que incluya acciones disciplinarias según corresponda”.

Además, se afirma que, en el papel la dotación de personal y horarios de los empleados de Los Padrinos Juvenil Hall parecen adecuados.

Sin embargo, los inspectores observaron una falta de personal e individuos que parecían no estar comprometidos a trabajar con los jóvenes.

“Sin previo aviso, se aplaza habitualmente al personal para cubrir los turnos o llamadas telefónicas”, dice el reporte. “Esto ocurre varias veces a la semana”.

“Los jóvenes no se sienten seguros y algunos reportaron que tienen que orinar en sus cuartos durante la noche; la falta de personal impacta otras áreas de incumplimiento como revisiones de seguridad, cuarto de confinamiento, búsquedas, educación, programas de recreación y de ejercicio”.

Dichos requisitos y regulaciones no se proporcionan regularmente, debido a la falta de personal.

El portavoz del Departamento de Libertad Condicionaldijo que están contratando nuevo personal.

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