Pareja trae el sabor de Colombia a las calles de Los Ángeles
La lonchera Colombia Exotic busca un lugar en el corazón de los latinos en el sur de California
La lonchera Colombia Exotic solo tiene un año sirviendo comida colombiana en las calles de Los Ángeles, pero con sus platillos llenos ideas innovadoras se está ganando un puesto en el paladar de los angelinos.
Además, su carro de comida es de los primeros en la ciudad en vender platillos del país sudamericano.
El concepto del negocio viene de Leonardo García y su esposa Alejandra Romero que son originarios de Colombia y tienen 3 años viviendo en Estados Unidos.
La primera experiencia de la pareja como inmigrantes en los Estados Unidos fue en Nueva York donde García trabajaba limpiando oficinas por sólo $100 al día y Romero se quedaba como ama de casa cuidando su hijo.
Una oportunidad laboral de García como asistente de abogado los obligo a mudarse a Los Ángeles, donde han aprovechado las oportunidades que se les han presentado.
Un día después de que García y Romero compraron un juguete para su hijo en la tienda Curacao en el centro de LA entraron al mercado nocturno, llamado El Gato, donde vieron puestos de comida mexicanos y centroamericanos, pero no había ningún un puesto colombiano.
Eso les dio una idea que se juntó con el deseo de García de no querer que su esposa se quedara sola en la casa sin trabajo, entonces decidió rentar un espacio en El Gato para que Romero pudiera tener algo que hacer.
La mujer estudió cocina internacional y cuando era joven sus padres tenían una panadería entonces se animó, ya que el arte culinario es algo que siempre le ha apasionado.
Poco a poco juntaron dinero para comprar la plancha y el freidor y empezaron vendiendo arepas colombianas, empanadas y salchipapas.
El ahora empresario dice que al iniciar el negocio lo que se ganaba era para pagar la inversión de la comida del puesto, pero la vida tenía otros planes para esta pareja y a los cinco meses perdió su trabajo y decidió dedicar todo su tiempo al puesto.
Al principio fue difícil entrar en el gusto de los latinos de LA, pero con el tiempo fueron conociendo sus gustos.
“Le echamos el mejor chicharrón, la mejor carne, le echamos ajo al pollo, todo bien sazonado y cuando le vendíamos la arepa al centroamericano o al mexicano, decían que sabía como a nada”, dijo García.
Un día una pareja les aconsejó usar chiles habaneros y eso cambió el rumbo de la lonchera.
Días después de recibir aquella sugerencia, Romero hizo varias pruebas hasta que logro una receta de salsa cremosa que quedó perfecta con las arepas y a los clientes les encantó.
“Cuando ya hicimos la salsa la gente empezó a decir que estaba bueno”, dijo García. “Entonces ya empezaron a venir y como el chile no era como el convencional de todos, sino era como crema, empezaron a venir más y más y fuimos agarrando clientes”.
Cuando creció el negocio invirtieron dinero para poder rentar una lonchera y desde entonces se han puesto en la calle Unión directamente al otro lado de donde empezaron en El Gato.
En la banqueta tiene una bocina que toca música de su país, el contagioso ritmo muchas veces atrae a colombianos y a latinos que van caminando.
De acuerdo con García, un día el dueño de Sabor Colombiano, un restaurante que está cerca, llegó a quejarse de que su lonchera le estaba quitando clientes, pero él piensa diferente.
“Nosotros más que todo manejamos la parte de la comida rápida, y ellos trabajan en cazuelas de mariscos o platos fuertes que nosotros no podemos vender”, explicó el dueño de Colombia Exotic.
García encuentra alegría en tener ideas innovadoras con la comida ya sea de él mismo, su esposa o su suegra que también ayuda los ayuda a cocinar.
Unas ideas que fueron muy exitosas fueron la hamburguesa “Monster” que llevaba doble carne, huevo y pechuga de pollo y las arepas “Monster” que era una mezcla entre carne, pollo, chicharrón, chorizo colombiano y aguacate por encima.
Este colombiano también mencionó que siempre trata de crear nuevas ideas para platillos para que los clientes no se aburran.
Actualmente está guardando dinero para abrir otra lonchera pequeña que venda solo empanadas de diferentes sabores como jamón con queso, queso, carne, pollo y pollo con champiñones y también piensa hacer unas cinco u ocho clases de salsa para hacer el chile para que la comunidad mexicana y centroamericana lo disfruten.
Recientemente, García ha visto más puestos de comida colombiana en el mercado nocturno donde él empezó y dice que le da gusto ver que hay más gente compartiendo la comida de su país.