Primer caso mortal en humanos de viruela de Alaska enciende alarma ante una enfermedad poco conocida

Funcionarios de salud de Alaska informaron sobre el primer caso de un paciente que murió a causa de un virus que se encuentra principalmente en poblaciones de pequeños mamíferos en aquella región de Norteamérica, llamado Alaskapox

Primer caso mortal en humanos de viruela de Alaska enciende alarma ante una enfermedad poco conocida

Se encienden las alarmas, ya que la enfermedad puede pasar de los animales a los humanos Crédito: AP

La muerte de un hombre en Alaska, enciende los focos rojos por ser la primera que se registra por el virus “Alaskapox” o viruela de Alaskaser, considerada como una enfermedad que afecta principalmente a pequeños mamíferos de esta región de Norteamérica. 

La víctima era un hombre de edad avanzada quien se encontraba hospitalizado para recibir un tratamiento de quimioterapia por cáncer. De acuerdo a personal de salud, tenía un sistema inmunológico debilitado debido al tratamiento que estaba recibiendo, lo que probablemente contribuyó a la gravedad de su enfermedad, señalaron las autoridades.

De acuerdo a reportes clínicos, el hombre fue ingresado en noviembre del año pasado y murió a finales de enero. Aunque no está claro cómo se infectó, se reveló que había estado cuidando de gatos callejeros y algunos de ellos le pudo haber arañado.

“Podría ser que el gato estuviera cazando topillos o musarañas y comiéndoselos y luego tuviera ese virus en sus garras y esa fuera la vía de infección, a través de un arañazo”, indicaron médicos a su cuidado.

A lo largo de seis semanas, el paciente visitó a su médico y al servicio de urgencias local por una lesión. Le recetaron antibióticos, pero su estado empeoró cada vez más hasta que fue ingresado. Las pruebas médicas finalmente dieron positivo en el virus Alaskapox.

El doctor Joe McLaughlin, epidemiólogo estatal y jefe de la Sección de Epidemiología de la División de Salud Pública de Alaska, señala que, se trataba de un paciente inmunológico que estaba expuesto a un mayor riesgo de contraer la enfermedad, pues, aunque las infecciones en humanos siguen siendo raras, la mayoría de las personas que pueden estar en contacto con este virus, el curso clínico sería “probablemente leve”.

“Seis de los siete casos han sido leves y autolimitados, por lo que el paciente ni siquiera necesitó ningún tipo de atención de apoyo de un proveedor de atención médica”, dijo McLaughlin.

Aun así, hay mucho que se desconoce sobre el virus, dijo McLaughlin, incluyendo cómo se transmite de animales a humanos y cuánto tiempo ha existido.

¿Qué es el virus Alaskapox y cómo afecta?

En un documento emitido por funcionarios de salud, el virus Alaskapox también conocido como viruela de Alaskaser, se trata de un ortopoxvirus que se identificó por primera vez en un paciente en Fairbanks, Alaska, en 2015. 

Lo que se conoce de esta familia de virus es que infecta a los mamíferos, incluidos los humanos, y pueden provocar el desarrollo de lesiones cutáneas.

Generalmente, se encuentran con mayor frecuencia en topillos y musarañas de lomo rojo. Sin embargo, es probable que el virus esté más extendido en las poblaciones de pequeños mamíferos de Alaska. Mascotas como perros y gatos no quedan exentos de este virus, pues también pueden contraer el virus.

Actualmente, no se conoce la transmisión del virus de persona a persona, Sin embargo, dado que ciertos ortopoxvirus pueden transmitirse por contacto directo con lesiones cutáneas, las autoridades sanitarias de Alaska recomiendan a las personas con lesiones cutáneas posiblemente causadas por la viruela de Alaska que mantengan el área afectada cubierta con una venda.

Hasta la fecha, se han registrado seis casos del virus a los funcionarios de salud de Alaska desde el primero en 2015. Todas las personas involucradas vivían en el área de Fairbanks, a más de 483 kilómetros de la península de Kenai. Todos fueron casos leves y se recuperaron sin necesidad de ser hospitalizados.

Los principales síntomas de la viruela de Alaska incluyen una o más lesiones cutáneas, de los ganglios linfáticos y dolor articular y/o muscular. Las personas inmunodeprimidas podrían tener un mayor riesgo de padecer enfermedades más graves.

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