Acusan a 3 hombres de intentar comprar armas en Dallas para un cártel mexicano

Un hombre de Texas y dos residentes de California están acusados de intentar comprar rifles de alto poder para un cártel de la droga mexicano, en una tienda de armas ubicada en los suburbios de Dallas-Fort Worth.

De acuerdo con el Dallas Morning News, los tres sujetos intentaban comprar al menos cuatro rifles de asalto M259S, una versión civil de la ametralladora ligera militar M249 SAW.

Fueron arrestados por comprar armas ilegalmente en nombre de otra persona. Esta es una táctica comúnmente utilizada por los cárteles mexicanos para evitar sospechas de las autoridades.

Los acusados son Ghaith Alagele, de 39 años, Mustafa Shaker, de 35, y Oliver Vielman-Solis. En enero pasado entraron a la armería RifleGear con miles de dólares en efectivo e intentaron comprar los rifles de asalto.

Según documentos judiciales obtenidos por The Dallas Morning News, las armas tenían suficiente potencia de fuego para invadir una pequeña ciudad.

Alagele y Shaker son inmigrantes iraquíes, mientras que Vielman-Solis era guatemalteco, pero los tres son residentes legales de Estados Unidos. Ahora están detenidos en espera de juicio por cargos de delito grave de tráfico de armas de fuego y conspiración para comprar un arma de fuego haciendo declaraciones falsas.

Ed Richardson, abogado de Shaker, dijo que el gobierno no ha presentado pruebas de que su cliente estuviera involucrado en otras ventas de armas. También dijo que el acusado sólo necesitaba dinero y “tomó una decisión estúpida.

La mayoría de armas provienen de Texas

Las condenas para quienes compren armas a nombre de otra persona se han endurecido. El año pasado entró en vigor una nueva ley federal que convierte las compras falsas en un delito grave, punible con hasta 15 años de prisión. Según el Washington Post, el Departamento de Justicia ha acusado a más de 250 personas en virtud de la nueva ley en los últimos 16 meses.

Los cárteles mexicanos han comenzado a buscar un aumento de su poder de fuego a medida que luchan entre sí por el territorio. Recientemente, la Oficina federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos advirtió a los vendedores de armas estadounidenses sobre esta tendencia y las compras ficticias.

Según un informe de la Oficina de Responsabilidad Gubernamental de Estados Unidos, alrededor del 70% de todas las armas recuperadas en México eran de Estados Unidos, y Texas representó el 42% de ellas.

Texas es el lugar perfecto para que los cárteles de la droga mexicanos compren sus armas, porque es difícil adquirirlas en México y el estado no requiere ningún tipo de licencia para comprar un rifle de alto calibre dentro de sus fronteras.

“Estamos teniendo un problema con las armas militares de alto calibre”, dijo Carlos Peña Ortiz, alcalde de Reynosa, una ciudad fronteriza mexicana, en 2022.

“Sabemos que la mayoría, si no todas, de estas armas de alto calibre provienen de Estados Unidos y una cantidad significativa probablemente provenga de Texas. El incentivo financiero para contrabandear armas a México es alto y comprarlas en Texas y conducir unas cuantas millas es demasiado fácil”, indicó.

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